Estados Unidos emitió una alerta ambiental contra el pez cabeza de serpiente del norte (Channa argus) debido a considerarlo como una creciente amenaza.
Según el llamado del Departamento de Conservación del estado de Missouri (MDC), esta especie es invasora y desequilibra los ecosistemas acuáticos.
Más noticias
¿Cómo es el pez cabeza de serpiente?
El Channa argus es un pez conocido por su apariencia intimidante. Puede crecer hasta un metro de longitud, con un cuerpo alargado, cabeza achatada similar a la de una serpiente y pequeños dientes afilados.
Su rasgo más notable es un órgano suprabranquial que le permite respirar aire, lo que le otorga la capacidad de sobrevivir hasta cuatro días fuera del agua si permanece húmedo.
Además, puede realizar movimientos torpes, pero efectivos en tierra firme, una adaptación desarrollada en hábitats asiáticos como arrozales y manglares con bajo oxígeno.
Esta resistencia le permite colonizar cuerpos de agua donde otras especies no sobreviven.
Su voracidad es otro factor preocupante: consume peces, crustáceos, ranas e incluso pequeños mamíferos, lo que lo convierte en una amenaza directa para la fauna nativa.
Autoridades de EE. UU. instaron a matarlo por ser un ‘depredador agresivo’
Originario de Asia, este depredador fue detectado por primera vez en Estados Unidos, en un estanque de Maryland, en 2002. Desde entonces se ha expandido a más de 15 estados, incluyendo Nueva York, Missouri, Pensilvania, Virginia y Delaware, según el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos.
El Departamento de Conservación de Missouri, en un comunicado del 7 de abril, instó a pescadores y ciudadanos a “identificar, eliminar y reportar ejemplares“, describiéndolo como un “depredador agresivo”. El animal desplaza a otras especies nativas como truchas y róbalos, afectando la pesca recreativa y comercial.
Su rápida reproducción, una hembra puede liberar hasta 50 000 huevos por camada, y su resistencia a entornos hostiles han hecho que su erradicación sea casi imposible, lo que llevó a las autoridades a priorizar la contención con la ayuda ciudadana para mitigar su impacto.
Expertos advierten consecuencias de no limitar su expansión
La introducción del pez cabeza de serpiente en el país norteamericano se atribuye a liberaciones accidentales o intencionales desde el comercio de acuarios y mercados de pescado vivo; antes de que su posesión fuera prohibida en estados como Nueva York, California y Texas.
Identificarlo es un desafío, ya que se asemeja al bowfin nativo; sin embargo, su aleta anal más larga y la ausencia de una mancha oscura en la cola son claves distintivas, según Smithsonian Magazine.
Para frenar su expansión, las autoridades promueven la pesca recreativa, que ha logrado reducir hasta un 25% de las poblaciones locales en algunas áreas.
Los expertos advierten que, sin medidas inmediatas, el Channa argus podría causar daños irreversibles a la biodiversidad, alterando ecosistemas y cadenas alimenticias en todo el país.