Las flores de la chuquiragua son utilizadas para el tratamiento de salpullido, hígado, riñones y fiebre. Foto: Cortesía PUCE
Las propiedades etnobotánicas de la chuquiragua han sido estudiadas en la última década por científicos de varios centros universitarios del país. En febrero, una investigación liderada por investigadores de la Universidad de las Américas (UDLA) hizo énfasis en los usos tradicionales de esta planta con el fin de determinar sus propiedades químicas.
El artículo Bioactive compounds and antioxidant capacity of Chuquiraga jussieui J.F.Gmel from the highlands of Ecuador, publicado en la revista Natural Product Research, se enfoca en las propiedades medicinales de las hojas y flores de esta planta.
Los investigadores recalcan que específicamente la Ch. jussieui J.F.Gmel, una de las 20 variedades de este tipo que existen en la región andina, puede encontrarse entre los 3 000 y los 5 000 metros sobre el mar.
Los científicos recalcan que el uso etnomedicinal de estas plantas es ampliamente conocido por las comunidades indígenas de los andes ecuatorianos. Por ejemplo, destacan que los pueblos ancestrales utilizaban infusiones de hojas, flores y tallos para el tratamiento de padecimientos relacionados con el hígado y los riñones debido a las propiedades diuréticas de la chuquiragua.
Al respecto, el ‘Diccionario de plantas útiles del Ecuador’, editado por la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), señala que de la ‘puka chukirawa’ (chuquiragua roja, en idioma kichwa) se usan sus flores para el tratamiento de salpullido, hígado, riñones, reumatismo, molestias menstruales, heridas, fiebre, gripes, cólicos y tos.
En la investigación liderada por Daniel Guerrero, de la carrera de ingeniería en Biotecnología de la UDLA, se determinaron el total de fenólicos, flavonoides, contenido de vitamina C y carotenoides presentes en hojas y flores de la chuquiragua. Los análisis en laboratorio demostraron que tienen compuestos bioactivos saludables relevantes. Por ejemplo, un extracto de esta demostró ser efectivo para eliminar los radicales libres y proteger a las membranas de los glóbulos rojos de la oxidación de los lípidos. Sobre esto, ellos destacan que las hojas son, en pruebas controladas, más efectivas que las flores.
Los resultados de los estudios en laboratorio refuerzan los conocimientos ancestrales que se tenían de esta planta. Los investigadores sugieren que deben realizarse mayores estudios sobre los componentes bioactivos de la chuquiragua. En el Ecuador existen actualmente unas 3 200 especies de plantas con propiedades medicinales. Según un estudio de la PUCE, un 20% ha sido introducido mientras que el resto es nativo.