La DJ y actriz ecuatoriana Lara Klart, nombre artístico de Laritza Párraga, promociona el tema Whisky Chanel. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
La carrera de Laritza Párraga, conocida en el mundo de la música electrónica como Lara Klart, ha sido impulsada por los sueños musicales de su hermana Jessica, que murió a los 18 años de edad, cuando Lara contaba con pocos unos meses de vida, pero quien la inspiró a través de sus diarios y escritos.
Como su hermana deseaba ser reina de belleza, inició una carrera en el modelaje y se convirtió en Miss Mundo Ecuador 2013, una experiencia que la convirtió en una mujer mucho más segura, dice. También en la música atendió el ejemplo de su mentora “imaginaria”, pero en su caso como disc-jockey (DJ) de música electrónica.
Lara Klart en una de sus presentaciones en Los Ángeles. Foto: Instagram, laraklart
La actriz ecuatoriana participó en el rodaje en Miami (EE.UU.) de la serie ‘Sangre de mi tierra‘ (2017-2018) de la cadena Telemundo, espera mudarse a México para un nuevo proyecto actoral y llegó a Ecuador para trabajar con la Fundación One Ecuador.
Lara Klart promociona su nuevo tema, Whisky Chanel, su primera canción en español, una base rítmica a la que le puso letra la venezolana Samantha Cámara, la voz del sencillo.
“La letra surgió de un proceso de colaboración. Es un tema en el que mezcló house, dance y pop, y un poco de sonido latino”, contó la artista. “Samantha quería transmitir la idea de dos personas que eran tan diferentes, pero que eran perfectas para estar juntas. En esta parte tecno y deep house más que letras son palabras y juegos de palabras que hablan de amor y con voces que por lo general destacan la sensualidad”.
La Directora y Vocera de la Fundación One Ecuador impartirá con el país un circuito de charlas con la que pretende crear “una ola de conciencia y educación emocional”.
Las charlas tratarán temas como la discriminación y el bullying, algo que la artista vivió en carne propia, pues nació en El Carmen (Manabí) en el seno de una familia humilde –pasó temporadas en Santo Domingo, Quito y Guayaquil-. La fundación, que colabora con diversas causas sociales, nació a partir de la catástrofe del terremoto de 2016 en Manabí y Esmeraldas, canalizando ayuda humanitaria desde Miami.