Los sistemas de transporte, la comodidad, el modo de vida, la música, Internet y el alcance a tecnologías más avanzadas, son importantes logros de la humanidad. Pero ¿nos convierte todo esto en seres humanos libres?
Acaso toda esa odisea nos ha llevado a vivir en un sueño creado por nosotros, en el cual esta fantasía tiene sus propias normas sobre qué es y qué no es felicidad, ¿Será que nos hemos vuelto dependientes de la tecnología sin darnos cuenta?
La libertad es enemigo de la dependencia, pero la sociedad actual y sus metas necesitan de tu dependencia hacia el sistema para que alcances tus sueños.
Mientras más se tiene, más se quiere, o en otras palabras, mientras más tienes, mayor es tu sufrimiento.
Si le preguntáramos a una flor silvestre cómo es posible que sea feliz sin las maravillas que ha creado el hombre, ¿qué nos contestaría? ¿De dónde copia esos colores y formas tan mágicas en sus pétalos?
Probablemente diría que no le hace falta, tal vez nos diría que siempre fue así .