La inteligencia artificial (IA) avanza cada vez más rápido a escala global. En este poco tiempo ha transformado aspectos de la vida. Sin embargo, el desarrollo tecnológico también ha suscitado preocupaciones sobre el impacto que puede tener en las capacidades cognitivas.
Lo preocupante es que la inteligencia artificial puede degradar y afectar directamente estas habilidades que distinguen a los humanos del resto de seres vivos.
Capacidades cognitivas
Antes que nada, es necesario identificar el concepto de capacidades cognitivas. Son aquellas que se refieren al procesamiento de la información, es decir, atención, percepción, memoria, resolución de problemas, comprensión, establecimientos de analogías entre otras
¿Se perderán las capacidades cognitivas?
En una publicación del diario español El País se establece que “la preocupación de que la tecnología pueda degradar las capacidades cognitivas no es nueva y merece la pena preguntarse si una mayor automatización provocará una pérdida de conocimientos especializados”.
La IA se basa en algoritmos y modelos de aprendizaje automáticos. Pueden realizar tareas cognitivas, como reconocimiento de voz, procesamiento del lenguaje natural y toma de decisiones. Si bien estos avances son importantes, también lo es considerar las posibles implicaciones de las propias capacidades cognitivas.
Dependencia de la tecnología
Uno de los efectos negativos de la inteligencia artificial en las capacidades cognitivas es la tendencia a depender en exceso de la tecnología. A medida que los sistemas de IA son más sofisticados, es fácil caer en la tentación de permitir que realicen tareas cognitivas en lugar de los humanos. Eso puede llevar a una disminución de la capacidad de pensamiento crítico, resolución de problemas y toma de decisiones , según la explicación dada en diario El País.
La comunicación se limita
La comunicación y la empatía son habilidades fundamentales que se desarrollan a través de la interacción humana, y depender demasiado de la comunicación con sistemas de IA puede limitar la capacidad de interactuar y conectar con los demás.