Los vecinos administran su propio parque

Todos los días, desde las 06:00, cerca de la terminal terrestre de Quitumbe, ubicada en el sur, hay personas que se reúnen para trotar. Lo hacen en las instalaciones de un parque, junto a las quebradas Ortega y El Carmen. El ingreso es por la avenida Cóndor Ñan.

Mario Andrade, jubilado de 63 años, se ejercita desde el 2005 en este espacio verde. Él asegura que el principal encanto del lugar es el aire fresco y el armonioso trinar de las aves.

Andrade recuerda que hasta antes del 2002, el lugar era un botadero de basura. “En los años noventa, la Cooperativa de Vivienda Alianza Solidaria compró al Municipio un terreno de 6 hectáreas, rodeado de quebradas”.

Por iniciativa de los propios socios de la cooperativa, se organizaron mingas para intervenir en la limpieza de las quebradas.

“Luego, aquí se edificó uno de los primeros parques lineales de Quito, junto a los conjuntos habitacionales”, añade Andrade.

Para la adecuación de los espacios verdes y los senderos se contó con el apoyo de la ex corporación Vida para Quito y de otras asociaciones. Por ejemplo, con el apoyo de la Cooperativa de Construcciones Eloy Alfaro se colocaron adoquines decorativos en los senderos y se construyó un puente sobre las quebradas.

Según el informe de la Corporación Vida para Quito (ya liquidada), en esta zona se ejecutaron obras dentro del plan de descontaminación del río Machángara.

Asimismo, los vecinos que integran la Asociación apoyaron con USD 182 000 para la ejecución de trabajos de limpieza y de otras obras complementarias como la colocación de bancas y cabañas de madera.

El parque tiene una extensión de 3,5 hectáreas. Hay árboles frondosos. También se sembraron pumamaquis, arupos, entre otras especies. Hay servicio de guardianía para los visitantes.

Martha Arellano, vecina del conjunto Vida Solidaria, llegó a hace tres años. Ella camina por el sendero del parque todos los días. Lo hace por su salud.

La mujer de 59 años se queja por la falta de colaboración de algunos vecinos que ensucian el parque. A lo largo de los senderos hay pocos basureros. En otras zonas, en cambio, se pueden ver bancas dañadas y hierba crecida.

“Hay una parte de los senderos del parque que está en el olvido. El agua del río está sucia. La descontaminación del Machángara no se ejecutó y hay malos olores”, denunció Arellano.

La molestia entre los habitantes también ocurre por la presencia de roedores que salen desde un terreno baldío que está en la mitad del parque. Allí hay un letrero donde se advierte que el ingreso es prohibido, por ser una propiedad de las Fuerzas Armadas.

Uno de los guardias que vigila el lugar y que prefirió no identificarse, contó que las tareas de cuidar las plantas y dar mantenimiento las ejecutan los mismos vecinos y que hay un responsable de regar agua y cuidar las plantas .

Según la Administración Zonal Quitumbe, el cuidado es responsabilidad de la Cooperativa. Sin embargo, el plan de descontaminación no se cumplió.

Espacio Público

La Gerencia de Espacio Público del Municipio es responsable del cuidado de parques y jardines en el Distrito Metropolitano.

En este mes se ejecutan trabajos de mantenimiento en 24 parques. Allí se cortan las ramas de los árboles y la hierba. Además, se limpian los parterres de las avenidas en el norte y en el sur.

El parque Las Cuadras es otro espacio verde en el sur del Distrito. En este lugar se organizan ferias y exposiciones en feriados y durante los fines de semana.

La Cooperativa de Vivienda Solidaria se formó en 1 990. La organización comprende varios frentes que integran una sola red.

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