En las noches, los líderes tsáchilas se reúnen para debatir sobre la importancia de declarar a la etnia como patrimonio inmaterial de Santo Domingo. Pero consideran que eso no puede darse mientras no se cumpla con el Plan de Vida.
Los tsáchilas mostraron sus costumbres y tradiciones a los más de 3 000 turistas que visitaron las siete comunas, durante los cuatro días de feriado, por el Día del Trabajo.
El bosque nativo Mushily está ubicado en 7 hectáreas de la comuna tsáchila Chigüilpe, en Santo Domingo.
Las tradiciones chamánicas de la nacionalidad tsáchila han tenido modificaciones. Antes, los consultorios estaban ubicados en la entrada hacia los bosques para proveerse de plantas medicinales y recargarse de las energías que emanan esos remanentes nativos.
Desde este año, se volvió a conmemorar la fiesta del Guama, en la comuna tsáchila Chigüilpe, en Santo Domingo. Esa celebración se realizaba hasta hace unos 200 años en las comunidades tsáchilas y se desarrollaba luego de la fiesta Kasama (Nuevo amanecer).
El deceso de Héctor Aguavil, el exgobernador de la nacionalidad Tsáchila, dejó un vacío en el activismo y la organización ancestral de su etnia.
Bosques, ríos, cascadas y tradición ancestral son la propuesta de la Ruta del Miya, que se impulsa en Santo Domingo de los Tsáchilas.
Para los ancestros tsáchilas, los juegos no solo eran actividades de entretenimiento. Ellos utilizaban los espacios de distracción para descubrir las habilidades de los niños y adolescentes. Por eso, cada juego está relacionado con el bosque, la agricultura, pesca, danza, música y medicina ancestral.
Las técnicas ancestrales que diferentes grupos étnicos utilizan para el tratamiento y uso de la caña son rescatados en Santo Domingo de los Tsáchilas por montuvios, indígenas y afros.
En las vacaciones escolares, los niños tsáchilas de la comuna Chigüilpe aprenden sobre las tradiciones y costumbres de la nacionalidad.
Tres días tendrán los miembros de la nacionalidad tsáchila para despedir a su líder Héctor Aguavil. Este 17 de febrero de 2018, los tsáchilas de las siete comunas han llegado hasta su vivienda para despedirse del exgobernador tsáchila.
Los tsáchilas piensan y observan objetos propios de sus tradiciones cuando se encuentran en sus momentos más íntimos.
Los tsáchilas interpretan dos tipos de danza en la fiesta Kasama, la más tradicional de la etnia radicada en Santo Domingo. La primera se hace en los rituales y la otra se realiza en la fiesta de integración.
Las mujeres y jóvenes tsáchilas han apostado por la conservación del bosque Chigüilpe, que fue talado hace cinco décadas para sembrar productos como el cacao y el plátano.
Los tsáchilas adaptaron el Carnaval a sus celebraciones hace 10 años. Estos festejos se conocen en las siete comunas como el Prima Tsáchila, se desarrollan en los ríos y se juega al carnaval con achiote, barros rojo y blanco que se obtienen de los bosques nativos.
La confección de prendas tsáchilas se ha convertido en una tradición familiar. Ese oficio hace más de 500 años era exclusivo de las mujeres tsáchilas. Las mejores tejedoras eran las abuelas, quienes supervisaban que la tradición se transmitiera de generación en generación.
Los chamanes tsáchilas utilizan plantas nativas para curar las enfermedades respiratorias, como gripes y resfriados.
En los territorios de la nacionalidad Tsáchila se desarrolla un proceso de cambios de su infraestructura. Los nativos aprovechan estas iniciativas para poner en práctica sus conocimientos ancestrales arquitectónicos.
En las comunas tsáchilas solo se realizan dos de los cuatro rituales para fin de año. Augusto Calazacón, historiador oral tsáchila, señaló que hace más de 500 años ellos conmemoraban la fiesta Kasama (Nuevo Amanecer), para despedir el año. Los ancestros se basaban en el calendario lunar para determinar el fin de un ciclo.
En una cabaña de pambil y caña guadúa, los tsáchilas de la comuna Chigüilpe cuidan el patrimonio cultural que heredaron de sus ancestros.