Los dueños de un McLaren conocen de sobra lo que implica tener un vehículo de altas prestaciones. Sin embargo, el fabricante británico quiere ofrecerles aún más deportividad a quienes pueden adquirir uno de sus modelos.
Los circuitos son su hábitat natural, las grandes velocidades son su forma de vivir y las emociones extremas son parte de su espíritu.
Una ‘batalla’ nunca antes vista se vive en Estados Unidos. Las calles son los escenarios de esta disputa y los principales ‘combatientes’ son el Ford Mustang, el Chevrolet Camaro y el Dodge Challenger.