Durante cinco meses, la psicóloga Adriana Oñate trató a Mario, de 35 años. Es un profesional exitoso que labora en una empresa de tecnología. Detallista, perfeccionista y dispuesto a dar el 100% en su trabajo. Estas características -aunque parecieran lo contrario- no lo hacen el empleado ideal, ya que si no hay un balance puede sufrir ‘burnout’.