Ella es la beneficiaria más antigua del San Juan de Dios. Su historia de vida muestra lo que la solidaridad ayuda a los más necesitados.
El aroma de las especies dulces y del mortiño envuelven el taller de panadería del Albergue San Juan de Dios, ubicado en el Centro Histórico.
Tras el anuncio de la suspensión de clases, el pasado jueves 12 de marzo, y del toque de queda por la propagación del covid-19, Lili Yépez y su amiga Mercedes –prefiere mantener su apellido en reserva- emprendieron una tarea titánica a través de la red social Facebook: sumar personas para que apadrinen a un abuelito de escasos recursos económicos, costeando la comida de todo un día, es decir, desayuno, almuerzo y merienda.
En estas semanas, en el albergue San Juan de Dios, centro, ya se evidencia la cercanía de la Navidad. Alimentan y alojan a por lo menos 150 personas. En diciembre suelen tener más de 250 huéspedes. En estos meses han recibido a migrantes venezolanos; necesitan donaciones, dijeron.
El libro ‘La medicina del San Juan de Dios’ y extrabajadores hablan del viejo hospital de Quito, convertido ahora en el Museo de la Ciudad.
Por los pasillos y las salas que tras más de 400 años siguen en pie, recuerdan las prácticas médicas de antaño, la camaradería y el trabajo en el extinto Hospital San Juan de Dios.
Asesorías jurídicas y psicológicas, trabajo social, apoyo logístico, atención en educación y salud se enmarcan en los campos de acción emprendidos por los gobiernos de Pichincha y de Quito, en favor de los ciudadanos venezolanos que llegan a la capital.
El 21 de diciembre se realizará el agasajo navideño en el albergue San Juan de Dios. Antes del evento, la institución del Centro de Quito puso en marcha una campaña para recolectar donaciones.
El albergue San Juan Dios es uno de los establecimientos en Quito que acoge a cientos de ciudadanos venezolanos que huyen de su país debido a la crisis económica. Allí, los llaneros pueden quedarse hasta 15 días.
En el albergue San Juan Dios, ubicado en el Centro Histórico de Quito, se realiza una campaña para recolectar enseres de hogar, comida y ropa para ayudar a los venezolanos que migran por la crisis económica y política que afecta a ese país.
La Navidad empezó en el Albergue San Juan de Dios. Este sábado 25 de noviembre se inauguró el tradicional pesebre del lugar. Este lleva 12 años de tradición y se encontrará abierto para la comunidad hasta el 30 de enero, de 08:00 a 17:00. El ingreso es gratuito.
Fueron 41 personas indigentes las que un viernes de 1997 Francisco Manzano, director del Albergue San Juan de Dios, recogió de las calles de Quito para brindarles un hogar donde vivir.