El diálogo entre jugadores y el nuevo presidente de la Comisión de Fútbol, Alfonso Harb, la tarde del lunes, fue positivo. Así indicó el técnico Rubén Darío Insúa ayer, antes del entrenamiento.
El estratega evitó dar mayores detalles de ese primer acercamiento entre el directivo y los futbolistas, pero aseguró que la llegada del ‘Pocho’, como es apodado Harb, es conveniente por su experiencia y conocimiento.
Barcelona necesita un triunfo para recuperarse en la tabla de posiciones acumulada y pelear el cupo al repechaje para la Copa Libertadores del 2011.
Este sábado deberá enfrentarse con Emelec, desde las 18:00, en el estadio Monumental. Para ello, el estratega y Harb pretenden levantar la autoestima de los jugadores. Para lograrlo buscan inculcar el sentido de pertenencia.
“El jugador de Barcelona debe saber que ese es su estadio, su cancha, su casa”, fue el argumento que dio el estratega.
A diferencia de partidos anteriores en que la base primordial era Quito, Barcelona tiene previsto viajar hoy, a las 11:20 hacia Guayaquil. Para la tarde está prevista una práctica en el estadio.
Desde la óptica de Insúa, Barcelona nunca debió salir de Guayaquil. Puso como ejemplo a Emelec, que alcanzó la clasificación a la final del Campeonato Nacional en la primera etapa, entrenándose normalmente en el Puerto Principal. También mencionó los casos de Liga y Deportivo Quito, campeones sin necesidad de salir de su terruño.
“La autoestima de los jugadores se recupera día a día, aunque es imposible hacerlo en una semana. Los resultados positivos son la clave”, agregó el estratega.
Otra de las intenciones de Insúa es proyectar una imagen de serenidad en el plantel. Eso se vio reflejado en el acceso que tuvieron los periodistas para conversar con los jugadores que aceptaran dar declaraciones. Insúa pidió conversar solo sobre el fútbol, sobre opiniones propias y no sobre rumores de peleas internas.