Los médicos del CAT ubicado en el Bicentenario informaron este 5 de junio que 45 personas con covid-19 son atendidas en ese centro.
Evitar las reuniones familiares y entre amigos es la sugerencia de las autoridades y médicos para reducir el riesgo de contagio por covid-19. Esa medida forma parte del protocolo de bioseguridad para contener la pandemia que azota a Ecuador desde mediados de marzo del 2020, pero ahora, por el frío que soportan los quiteños, cobra mucho más protagonismo.
Las camas con conexión de oxígeno, los insumos y el tomógrafo están listos para la atención en el Hospital Bicentenario de Guayaquil. Pero el personal médico de esta unidad municipal espera que no lleguen nuevos pacientes.
En Ecuador, como en otros países del mundo, una de las tradiciones es reunirse entre familiares y amigos para celebrar la Navidad, la noche del 24 de diciembre y la mañana del 25. Son fechas del año en las que se juntan abuelos y nietos, es decir población de diversa edad, desde los mayores hasta los niños. En este 2020, por la pandemia del covid-19, la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), del Gobierno y de médicos es festejar solo con el núcleo familiar, con los convivientes, es decir con quienes se habita en la misma casa.
La Oficina regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó este miércoles 16 de diciembre del 2020 el uso de mascarillas en las reuniones familiares navideñas y advirtió del riesgo de una tercera ola en los primeros meses de 2021.
“De todos depende que la historia no se repita. Usa siempre mascarilla, evita cualquier tipo de aglomeración y, sobre todo, si vas a salir, hazlo solo; no expongas a tu familia”. El mensaje ha sido difundido en las últimas semanas en las redes sociales del Municipio de Guayaquil, en la voz de la alcaldesa Cynthia Viteri.
Las autoridades sanitarias de Chile anunciaron este miércoles 2 de septiembre de 2020 que se permitirán las pequeñas reuniones familiares en las zonas bajo cuarentena para conmemorar las fiestas patrias, mientras bares y restaurantes comenzaron a abrir al aire libre en algunos barrios de Santiago.
La capital azuaya vive un atípico Día de la Madre, trastocado por la emergencia sanitaria del covid-19 que azota al Ecuador. No hay salidas a restaurantes, paseos, reuniones familiares ni almacenes abiertos para comprar los regalos.