La diáspora de venezolanos en la región volvió a activar los debates sobre la forma en que la gente mira a los otros, lo que piensa de ellos y por qué en muchos casos los repele. Oswaldo Obregón, un editor colombiano que vive en el país desde hace veinte y dos años, reflexiona sobre estas problemáticas y las posibilidades que tiene una sociedad para evitar la xenofobia. La conversación transcurre en una cafetería del norte de Quito donde la atención está a cargo, como en otros negocios de la ciudad, de una mesera venezolana.