La obra de Eduardo Galeano es a la literatura lo que el tango a la música: está hecha de dolores y golpea sensiblemente y directo al corazón humano. Periodista precoz –a los 20 años era editor del semanario Marcha, de Montevideo–, alcanzó su primer éxito con un libro ya clásico en el idioma: 'Las venas abiertas de América Latina', publicado en 1971. Uno de esos libros que iluminan y ensombrecen a un escritor porque parece ser el único grande de su obra.
El Tiempo, Colombia, GDA En una época, cumpliendo uno de esos raros rituales de la justicia poética, algunos buenos escritores, que se morían tan discretamente como habían vivido, eran sacados del olvido y rescatados para la incierta posteridad con todas sus galas. La muerte les traía su cuarto de hora póstumo.
El 18 de enero de 1991, centenares de fieles musulmanes congregados en la mezquita Ed Dwa, en el barrio Stalingrad, de París, elevaban sus plegarias de júbilo por Saddam Hussein. El lanzamiento de misiles a Israel era, para los seguidores del dictador, la respuesta esperada al ataque israelí sufrido por Iraq en días anteriores. Según contaba El País de Madrid en crónica del 19 de enero, “policías con metralletas y chalecos antibalas y agentes de los servicios secretos franceses vigilaban estrechamente la mezquita”. Nada nuevo: esta es la fuerza disuasiva visible cuando el fervor religioso se vuelve desorden callejero.
El Tiempo, Colombia, GDA El hecho: la retención, según ellos; el secuestro o privación violenta de la libertad, según el sentido común. El uno fue tan escandaloso como su representación gráfica: es la foto donde secuestrador y secuestrado sonríen vestidos de civiles a las cámaras en el momento en que el general Rubén Darío Alzate es entregado al Comité Internacional de la Cruz Roja por el comandante alias ‘Pastor Alape’.
Óscar Collazos (Bahía Solano, Chocó, 1942), es uno de los escritores contemporáneos más importantes e impactantes de la literatura latinoamericana. El uruguayo Mario Benedetti, años atrás, dijo de él: “La realidad parece haberse convertido en una innegable provocación para los narradores colombianos. Unos, como García Márquez, tienden a hacerla mito; otros, como Óscar Collazos, a desmitificarla”.
Un viejo periodista brasileño, testigo del ‘Maracanazo’ de 1950, cuando la Selección uruguaya bajó de su nube a la encumbrada Selección brasileña, testigo de la tragedia nacional del pasado miércoles, le dijo a W Radio que el problema de hoy era la falta de arraigo de los jugadores.
Se sabía, desde un principio, que el proceso de paz con las FARC iba a tener enemigos. Los tenía antes de empezar; antes, aún, de que se conocieran los antecedentes secretos que aclimataron las conversaciones con un ingrediente: la disputa personal entre un expresidente y el presidente.
Estoy casi convencido de que si no se hubiera atravesado el incidente personal que acabó con la amistad de dos grandes escritores, aquello que a partir de cierto momento los separó políticamente, podría haber sido un ingrediente digerible y estimulante de esa amistad.
Algunas veces me pregunté si al saber que empezaba a sentir las mismas "evasiones de la memoria" que vivió Macondo cuando sobrevino la peste del insomnio, GGM pensó regresar a su libro y reconocerse en sus páginas. No lo hizo, quizá, por el pánico de saber que ya no habría un Melquiades que lo sacara "del tremedal del olvido".
El 9 de abril de 1948 tiene un significado simbólico que, aun hoy, sirve para explicar comportamientos extremos de los colombianos. No solo es un ejemplo de la estrategia de eliminación que se adoptó para cerrar las puertas a los cambios políticos. El asesinato de Gaitán confirma la tendencia a dejar en el limbo de la justicia los crímenes más atroces de nuestra historia.
Un fantasma recorre la geografía uribista: el castrochavismo. ¿Su fin? Asustar a los incautos y ganar seguidores con el infundio. Y no es que la alianza entre los hermanos Castro y el Gobierno de Venezuela no exista. Existe. Y debe de existir más allá del simple intercambio de petróleo por médicos, en niveles que tocan la seguridad del Estado y métodos para combatir a la oposición.
Nada más fácil que dejarse llevar por las pasiones. Nada más irresponsable que echarles fuego a los dos trapos empapados de gasolina en que se han convertido Gobierno y oposición en Venezuela.
La incertidumbre que rodea el paso del presente al inmediato futuro -de las sociedades y los individuos- ha permitido que florezcan las industrias de la adivinación. Lo que estaba reservado a los profesionales de la astrología lleva cierto tiempo haciendo de las suyas entre profesionales del periodismo.
'La intimidad, para mí, no consiste en mantener mi vida oculta a los demás, sino en ahorrarme la intrusión de las vidas privadas de los otros", escribió el novelista Jonathan Franzen en 'Más afuera'. Este libro de ensayos contiene uno verdaderamente delicioso: 'Solo llamo para decirte que te quiero'.
No me siento capaz de discutir sobre asuntos teológicos. Después de haber sido hasta la pubertad un entusiasta de la religión católica, llegué a la adolescencia chapoteando en un mar de dudas, alimentadas por el fuego de los escritores que empecé a leer en una biblioteca pública.
Han pasado cinco años desde que Fernando Escobar, el joven personero de Soacha, destapó uno de los escándalos más indignantes de la "lucha antisubversiva" en el interior de las Fuerzas Militares: la desaparición y asesinato de muchachos de familias humildes, presentados como guerrilleros abatidos en combate.
Paul Dolan, profesor de la London School of Economics, fue uno de los conferencistas más taquilleros del Hay Festival 2013. Aunque disertó sobre la felicidad, no pudo explicarnos por qué, en una nueva encuesta, Colombia había clasificado como el país “más feliz del mundo”.
‘Memoria de mis putas tristes’ (2004), la última novela escrita por García Márquez, no es la mejor de sus novelas ‘menores’, pero sí la única que se ha visto envuelta en una polémica que divide más a las mujeres que a los moralistas. Y todo nace de un equívoco, ahora argumento militante: confundir la vida de los personajes de ficción con la moral e ideología del escritor.
En febrero del 2011, la Flip (Fundación para la Libertad de Prensa) publicó un informe extraordinario sobre la situación de la prensa y los periodistas en Colombia. En uno de los apartes del informe, Ignacio Gómez, entonces presidente de la Fundación, señalaba que “la comparecencia ante los tribunales se convirtió en un método que las personas interesadas en acallar la prensa están utilizando para sacar al periodista de su oficio (...)”.
Una sola frase, sacada de su contexto, sirvió para hacer un escándalo con las declaraciones de un gran escritor de novelas de aventuras. Arturo Pérez-Reverte dijo, en efecto, que "Internet es el triunfo de la estupidez". No dijo, sin embargo, que la estupidez no ha necesitado tecnologías avanzadas para triunfar en distintos momentos del devenir humano. Le ha ido bien en las civilizaciones manual y mecánica y ahora se pavonea y se vuelve más visible en la virtual.