El alcalde de Cuenca, Cristian Zamora, mantuvo un encuentro con el papa Francisco en El Vaticano.
La agenda de actividades está lista. Tres eventos reemplazarán al tradicional Pase del Niño Viajero que se realiza, cada 24 de diciembre, en la capital azuaya. Esta ocasión por la pandemia se realizará un sobrevuelo por las parroquias rurales, un recorrido en el papamóvil por la ciudad y un festival religioso-cultural.
En la entrada del Monasterio del Carmen de la Asunción, de la capital azuaya, una banda de pueblo alegró con villancicos. En el altar, más de 200 panes y chicha rodearon la imagen del Niño Viajero.
Cada año se incrementa la participación de personas adultas en el tradicional Pase del Niño Viajero, que se realiza cada 24 de diciembre en Cuenca. Este 2018, familias completas se revistieron para ser parte del recorrido que se desarrolló durante seis horas por la calle Bolívar.
Durante el pase del Niño Viajero en Cuenca, se mantiene la costumbre de elaborar y compartir alimentos tradicionales como el pan y la chicha. Esta tradición se ha transmitido de generación en generación. Varias mujeres y devotas del niño Jesús, llevan a cabo esta labor.
Este 24 de diciembre, la capital azuaya vivirá una de las tradiciones más ricas y diversas de la cultura ecuatoriana: el pase del Niño Viajero, muestra del sincretismo cultural y religioso de los pueblos. El pasado viernes fue el pregón.
El pase del Niño Viajero, que es Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado desde hace nueve años, es el principal atractivo turístico del Austro durante la Navidad. Este recorrido se realizará el domingo desde las 09:00 y durará más de cinco horas.
Con niños vestidos de los personajes bíblicos se realizó este viernes 15 de diciembre el pregón del Pase del Niño Viajero, que es la expresión religiosa-cultural más importante de la Navidad, en la capital azuaya. El evento fue organizado por la Arquidiócesis de Cuenca.
Con un clima agradable, a las 09:30 de este 24 de diciembre del 2016, inició la peregrinación religiosa más grande que vive el país en esta fecha: el Pase del Niño Viajero. Cientos de católicos participan de esta tradicional fiesta en homenaje al Niño Jesús que se realiza cada año en la capital azuaya, en el sur del Ecuador.
La tradicional bienvenida en el mundo católico de la llegada del Niño Jesús se celebra en nuestro país con diferentes celebraciones, procesiones y peregrinajes. En cada localidad hay un Niño y sus devotos, pero son tres -particularmente en la región andina- que congregan a miles de creyentes en todo el Ecuador: el Niño Viajero, el Niño de Isinche y el Niño Rey de Reyes.
Los carros alegóricos reflejan la riqueza cultural que tiene el pase del Niño Viajero, en la capital azuaya. Luego de los desfiles, las familias comparten los alimentos que utilizan para decorar los mismos, en una gran pampamesa.
Una ambiente colorido y de fiesta se vive este 24 de diciembre en la capital azuaya, donde se desarrolla el tradicional pase del Niño Viajero. Festividad que se celebra desde 1961.
Un vestido de tonalidad verde utilizará el próximo martes el Niño Viajero durante su tradicional pase. El recorrido, que congrega a más de 35 000 personas, se iniciará a las 10:00 en el centro de Cuenca.
Los preparativos para el Pase del Niño Viajero, que es la fiesta religiosa más importante de Cuenca, se efectúan por parte de las religiosas del monasterio del Carmen y los priostes.
Atareadas están las 17 religiosas del convento del Carmen de La Asunción de Cuenca. Desde octubre pasado se afanan en los preparativos para el pase del Niño Viajero, el 24 de este mes.Los arreglos comprenden desde alistar la comida para el día del pase, la entrega de fundas de caramelos, refrigerios para la novena hasta la confección de los vestidos del Niño. Según la priora del convento, María Leonor del Espíritu Santo, quien lleva su rostro cubierto por ser de un claustro, este año se confeccionaron cuatro vestidos. Las telas fueron obsequiadas por feligreses azuayos. Una de las religiosas que elabora los vestidos es la madre Ana. Lo hace desde hace 29 años. Primero dibuja en moldes el diseño del vestido que ha sido escogido. Es un corte singular porque el Niño tiene su brazo derecho alzado. Luego traza en la tela y corta. Cose a mano y al final coloca las piedras y borda. También confecciona una capa pequeña, ropa interior y zapatillas que son parte del ajuar del Niño Viajero. Tiene
Los alumnos de las escuelas 3 de Noviembre, Alfonso Cordero, Elena Moscoso Tamariz, Dolores J. Torres, entre otras, participaron esta mañana en el pregón del pase del Niño Viajero.