Las autoridades suizas multarán a las personas que lleven burka, velo integral u otras vestimentas que oculten su rostro en público.
Las musulmanas que residen en EE.UU. han decidido defenderse. Y han empezado a tomar clases de defensa personal como una forma de resguardarse de los crecientes ataques violentos con tintes xenófobo y religioso.
Dos mujeres, entre ellas una policía, fueron agredidas en Nueva York por ser musulmanas, y algunas esvásticas aparecieron en el metro, últimos episodios del alza de actos racistas en ese país desde la victoria presidencial de Donald Trump.
Asra Q. Nomani fue periodista de The Wall Street Journal. También es cofundadora del Movimiento de Reforma Musulmán. Es mujer e inmigrante. Y vota en los Estados Unidos. El pasado martes 8 de noviembre hizo algo que nadie hubiera esperado de alguien que reuniera sus características: votó por Donald Trump.
Las autoridades de dos universidades californianas anunciaron el jueves 10 de noviembre d e2016 que la policía investiga ataques contra estudiantes musulmanas, uno de los cuales es considerado un crimen de odio.
Una peluquera compareció el jueves 8 de septiembre del 2016 en un tribunal de Noruega por haber rechazado a una musulmana que llevaba el hiyab, en el primer caso sobre el uso del velo juzgado en el país.
Las leyes municipales que prohíben a las mujeres islámicas vestir burkinis en las playas públicas en localidades francesas logró su primera aplicación en un exclusivo balneario de Cannes, en el sur de ese país.
Cuando se trata de la prohibición de usar burkinis en playas occidentales no hay respuesta fácil ni solución que se avizore en el corto plazo. Esa imposibilidad, no impide darse cuenta, como sostiene la feminista paquistaní y activista por la secularización Alishba Zarmeen, de lo que esa prenda representa, incluso para aquellas mujeres que la usan de buena gana y la defienden, con todo el derecho que les da la libertad de la cual gozan (y ojalá sigan gozando) en Occidente.
Frente a la polémica por el burkini en Francia, mujeres musulmanas que adoptan la prenda de baño que cubre el cuerpo dudan entre la incomprensión por el absurdo debate y la furia por ser de nuevo estigmatizadas, y dicen que lo usan como “mujeres libres” .