Son las 06:00 y entre la espesa vegetación se escuchan fuertes aullidos. En esta ocasión no se trata de lobos, sino de los monos aulladores que habitan en la reserva y estación biológica del bosque seco Lalo Loor.
Jóvenes ambientalistas nicaragüenses promueven una campaña para evitar que los monos congo de los bosques del Pacífico sur del país perezcan o pasen hambre por la sequía y la destrucción de su hábitat, informó este lunes la Organización Nicaragüense Ambiental (ONA).
Las muertes de monos aulladores van en aumento. Entre el primero y el 22 de febrero el Ministerio del Ambiente (MAE) registró 51 cadáveres de primates en estado de descomposición avanzado en la reserva Pacoche, cantón Manta, provincia de Manabí.
Autoridades, veterinarios y técnicos del Ministerio del Ambiente analizan las posibles causas de la muerte de 47 monos aulladores en la reserva Pacocha, en Manabí.
Ningún turista puede ingresar a la Reserva Pacoche, ubicada en los cantones manabitas de Montecristi y Manta. La medida se adoptó para evitar posibles riesgos sanitarios por el fallecimiento de 44 monos aulladores en la zona.
Los moradores del sector La Solita, en Montecristi (Manabí), estaban acostumbrados al sonido que hacían los monos aulladores en los árboles. Pero desde hace alrededor de 15 días, los sonidos son más suaves.
El Ministerio del Ambiente (MAE) informó la noche de este martes 16 de febrero del 2016 que el número de monos aulladores hallados muertos en Ecuador asciende a 44. Por esa razón, el refugio de Vida Silvestre Marino Costera Pacoche, en Manabí, donde se registraron los decesos, fue cerrado temporalmente al paso de turistas, a manera de cerco epidemiológico. En reserva existen aproximadamente 600 primates de esta especie.
En Nicaragua se registra la muerte de monos aulladores en las poblaciones de San Juan del Sur, Tola y Chacocente en Rivas.