En el restaurante Rincón de Franco, ubicado en la calle Jerónimo Carrión y av. 12 de Octubre, los almuerzos cuestan USD 2,75. Se atiende a estudiantes y oficinistas. FOTO: Paúl Rivas/ EL COMERCIO
Desde la 12:00 los restaurantes y cafeterías del Centro Histórico, La Mariscal, La Carolina e Iñaquito se preparan para recibir a oficinistas y estudiantes que buscan la mejor opción para disfrutar de su hora de almuerzo.
Las pizarras que indican las promociones, o los letreros en las puertas con los “platos del día”, forman parte de este escenario que busca satisfacer la demanda que se genera por la cantidad de bancos, ministerios, universidades y empresas que se concentran en la zona.
La aglomeración de estas instituciones conlleva una mayor movilidad; en esta zona se realizan hasta 2, 7 millones de viajes diarios en transportes público y privado, según la última encuesta de movilidad.
La cifra anterior representa la generación de una población flotante de 1 305 790 personas, quienes son potenciales clientes de estos sitios.
Solo en una cuadra de la calle Mariano Aguilera, entre La Pradera y Martín Carrión, ubicadas detrás del edificio del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap) se ubican 14 locales de comida que forman parte de los 2 984 restaurantes y cafeterías que tienen permiso de funcionamiento en Quito, según la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa). De estos, el 80% se ubica en la zona financiera y comercial.
Los clientes llegan en su mayoría en grupos, vistiendo los uniformes de sus empresas y conversando sobre temas del trabajo. También están los jóvenes que al terminar sus clases recorren las cuadras hasta hallar un menú conveniente.
La oferta es variada en la zona, ya que hay platos de la Costa, hamburguesas y también están quienes tienen menús más light. Pero, además de la variedad de comida, lo que más influye es su precio. Así lo cuenta Fernando Loayza, quien trabaja en una entidad pública en el sector. Junto a sus compañeros acude por lo menos tres veces por semana a uno de estos sitios donde consigue su almuerzo por USD 3.
Mery Granda, encargada del restaurante El Muelle, es quien los atiende. Ella explica que al pagar ese valor, el cliente puede elegir entre dos opciones de sopa y dos de segundo, también incluye una bebida y el postre. Hace cuatro años, estaban ubicados en este sector cercano al Ministerio; y hace dos optaron por un nuevo local, de dos pisos, en este mismo sector, para cubrir la demanda que se generó.
Pero el estar en el centro financiero también tiene desventajas, cuenta Carlos Martínez, propietario de Cheese BBQ. Cuando disminuye el personal de las empresas las ventas bajan. A eso atribuye la disminución del 50% en la venta de sus almuerzos.
Por otro lado, Franco Vargas, propietario del Rincón de Franco, ubicado en la calle Jerónimo Carrión y av. 12 de Octubre, mantiene su oferta de almuerzos a 2,75 y vende hasta 150 almuerzos diarios.
A lo largo de esta calle y las aledañas se ubican más de 15 sitios con ofertas similares. Los locales se extienden por La Mariscal, donde se suman los sitios considerados turísticos.
Oferta
El sector financiero y comercial concentra una gran cantidad de comensales y restaurantes
En contexto
Según la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) en el Distrito Metropolitano de Quito está la mayor cantidad de restaurantes con permiso de funcionamiento ( 2 984) seguido por Guayaquil, Samborondón y Durán ( 2 445).