Para las supersticiosas uno de los días más 'temidos' es cuando llega el cabalístico martes 13, una jornada llena de mitos y leyendas.
El martes 13, un día y un número que han sido vinculados a la desgracia y mala suerte. La verdad es que no existe argumento científico para otorgarle connotaciones negativas a esta fecha.
Si en el mundo anglosajón el viernes 13 está asociado a la mala suerte, en muchos países hispanohablantes, así como en Grecia, el día de los malos augurios es el martes 13.
Aunque en algunos países anglosajones la fecha de las desgracias sea un viernes 13, en la mayoría de los países de América Latina es hoy martes 13 cuando las supersticiones y los temores afloran más que nunca. Las historias de terror y los recaudos se multiplican. Es por eso que en los últimos días, en la red social Reddit, varios usuarios compartieron sus historias paranormales.
“Martes 13, ni te cases ni te embarques, ni de tu familia te apartes” es un viejo dicho que aún está vigente y más un día como hoy, martes 13 de septiembre del 2016. Si eres supersticioso este día tratarás de alejarte lo más que puedas de los gatos negros y las escaleras. Pero alguna vez te detuviste a pensar ¿por qué consideramos el martes 13 como un día de mala suerte?
“En martes 13 ni te cases, ni te embarques ni de tu familia te apartes”, dice un conocido refrán que hace alusión a que cosas malas pueden suceder en días como hoy, martes 13. La creencia del martes 13 como un día de mala suerte es una superstición histórica.
A las 8:30 de hoy, 13 de mayo, el Registro Civil del norte de Quito luce sin aglomeraciones ni largas filas. Entre las oficinas y los cubículos se observa un letrero que dice Matrimonios. En las áreas de espera están sentados en unas sillas metálicas Caterine Avilés y Luis Oviedo. Ella lleva puesto un vestido blanco y unas sandalias plateadas. A su lado se encuentra su futuro esposo, con un pantalón, una camisa blanca y una corbata a rayas. Mientras esperan comentan que casarse un martes 13 no les quita el sueño, porque no son supersticiosos. Según Oviedo, él ni siquiera se había dado cuenta de la fecha sino hasta que su hermano le hizo caer en cuenta. Esta pareja de cristianos se conoció hace dos años y medio en Quito. Ella es oriunda de Vinces y él de Macará. Después de unos 10 minutos de espera, el juez los hace ingresar a la sala dos de matrimonios, pero casi de forma inmediata salen nuevamente porque están a la espera de que una amistad de la pareja llegue. Mientras tanto, comenta