La pieza de danza contemporánea pone en escena los valores de amistad y el afecto entre dos adolescentes marginales quienes, en un encuentro lúdico e inocente, se amenazan con navajas sin imaginar que el juego tendrá un desenlace trágico. Ese es el argumento alrededor del cual el coreógrafo Luis Mueckay construyó ‘Todo aquel sorprendido, todo aquel consignado’, que el también actor y director de teatro ecuatoriano volvió a presentar en México luego de 31 años.