El escritor italiano Ítalo Calvino ya lo sospechaba. En su libro de ensayos ‘Seis propuestas para un nuevo milenio’ (1985), predijo que el acelerado ritmo de vida de los habitantes del siglo XXI obligarían a los lectores a acercarse a textos cada vez más cortos.
La tercera edición del libro ‘Viaje a las misteriosas montañas de Llanganati’, de Luciano Andrade Marín, ya está en circulación. Fue editado por el Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP) y recoge el relato del autor y de sus compañeros Tulio Boschetti y Humberto Re sobre sus andanzas por los Llanganati.
Si a Agustín Cueva Dávila (Ibarra, 1937) no se lo hubiera llevado un cáncer al pulmón el 1 de mayo de 1992, hoy quizá podríamos polemizar con él sobre si la literatura es la inevitable expresión de una clase social, como él creía con vehemencia. Al menos el literato guayaquileño Fernando Balseca estaría feliz de tener esa oportunidad de revisar esta idea medular del pensamiento de uno de los intelectuales ecuatorianos más interesantes del siglo XX.
El narrador, ensayista, poeta, antólogo y crítico literario guayaquileño Miguel Donoso hace pública, esta noche, su más reciente obra titulada ‘La tercera es la vencida: últimas palabras y el oscuro resplandor’. La cita es a las 19:00, en el Auditorio Simón Bolívar (ex MAAC).
El escritor, crítico, catedrático y ensayista azuayo Oswaldo Encalada realizó durante cuatro años una investigación para conocer el porqué del regionalismo existente en el país y el lenguaje de los ecuatorianos.
Cuando tenía 11 años, Eugenia González Tinajero recitó, al pie de un gran árbol de aguacate, una poesía en honor a su ilustre tío tatarabuelo, don Juan Montalvo Fiallos.
Lina Piedad González Tinajero recuerda su infancia en la hacienda Puntzán, ubicada a los pies del volcán Tungurahua, en el cantón Baños.
La obra se llama ‘La sombra de Eros o la plenitud oculta del ser’. El autor es el carchense Juan Jacobo Melo quien ha sido proclamado como uno de los ganadores del premio internacional de ensayo Limaclara 2012.
Si en el primer poema de ‘No es dicha’, publicación del quiteño Juan Secaira (1971), se dice: “Accidente: posibilidad de un comienzo”; dejo que esta lectura de su libro también se libere accidental.
‘O Terre! Terre trois fois maudite, cette fois-ci, ô Terre! je te contemple animé de toute la haine dont mes yeux seront un jour capable.” Así escribía el poeta ecuatoriano Alfredo Gangotena en el quinto poema de su ‘Absence’. El libro está dedicado, entre otros, a Henri Michaux, autor con quien Gangotena trabó amistad durante su estancia en el país galo, y quien viajó al terruño de su amigo para dejar escrito un diario al que tituló‘Ecuador’.
Jorge Velasco Mackenzie asegura que el único lugar en el que no le gustaría presentar su más reciente libro es en Galápagos. Es en ese sitio, que en su novela es llamado “las islas encantadas-malditas”, donde transcurre la mayor parte de ‘Hallado en la grieta’. La obra, narrada en tercera persona, trata la relación de desamor entre Ailyn (de origen asiático) y Valdemar Ventura (un marinero ). Y siguiendo la estructura que el autor utiliza en sus talleres de literatura, consultamos a literatos que hagan una disección de la novela.
La palabra profunda y dolorosa del gran poeta peruano César Vallejo sigue supurando como grata herida abierta tras los 120 años de su nacimiento, efeméride que se cumplió ayer.
Las palabras que grabó la narradora Ángela Arboleda para la contestadora automática de su celular van al grano: “Hola, seguro estoy metida en el cuento. Déjame tu mensaje”.
El segundo libro de Fernando Escobar Páez (Quito,1982), ‘Miss O’ginia’, se ubica en el bando contrario de todo lo políticamente correcto y, claro está, de lo absolutamente desechable.