Un duendecillo jorobado camina sonriente, tiene necesidad de confirmar el espacio, de sentirlo. Su rostro y su cuerpo hablan al público, expectante de cada movimiento, discreto y acompañante en el silencio, pero tan vulnerable a los actos provocadores del personaje de una de las cinco piezas que interpretará La Buena Compañía. 'Narciso', así llamó a esta pieza el maestro ecuatoriano del mimo José Vacas, quien se retiró definitivamente de las tablas en enero de este año.