Hay que aclarar que la parte que más se aprovecha de la planta de Jamaica es el cáliz. Este sirve para preparar aguas combinadas con frutas, mermeladas, ates, jaleas, cremas y algunos platillos con carnes como pato.
Adriana Durán
Periodista de Menú
Ha escrito en las revistas México Desconocido, A La Mesa Tentación, Ritos y Retos del Centro Histórico, Sabor a México. Hoy colabora en los suplementos Menú y Día Siete de El Universal. El Universal de México, GDA
Esta planta es originaria del África, su llegada a México fue durante la época colonial y desde entonces se puede encontrar en algunas partes del sur del país, como Guerrero, Colima y Campeche, aunque entre estos principales destaca el estado de Oaxaca, ya que tiene un sabor único y especial.
La Jamaica tiene propiedades alimenticias y medicinales, ya que es antiparasitaria, diurética y ligeramente laxante. Otro de sus beneficios, es que ayuda al proceso digestivo y renal, es útil para bajar de peso y para controlar el grado de colesterol y triglicéridos.
En Egipto al agua de Jamaica se le conoce como karkadé y es una de las bebidas tradicionales del país. Se acostumbra tomarla bien fría, aun cuando en invierno hay quienes la toman caliente. En el sur de Egipto, en ciudades como Asuán y Luxor en los hoteles suelen recibir a los huéspedes con una infusión de karkadé.
Así que hay que poner en práctica algunas recetas para aprovechar este delicioso cáliz, que brinda beneficio y frescura al organismo.
Para preparar el agua de Jamaica, según la receta de la chef Martha Ortiz en el libro Cocina, Nutrición y Salud, hay que disponer dos puñados de pétalos de rosas en una olla y verter cuatro tazas de agua hirviendo.
Dejar macerar por una hora. Aparte, poner a hervir un cuarto de taza de flores de Jamaica con dos tazas de agua y dejar reducir a la mitad. Retirar del fuego, colar y agregar la infusión de rosas. Se endulza al gusto.
También puede macerar una cucharada de jengibre fresco picado, cuatro clavos y la corteza de una naranja cortada en juliana, en lugar de pétalos de rosas. O usar una infusión preparada con las cortezas de dos naranjas y un limón en vez del agua de rosas, y junto con la Jamaica hervir un cuarto de tazas de flores de azahar.