Este año la Navidad está inevitablemente marcada por las restricciones sanitarias a causa del covid-19. Pero pasar unas fiestas en casa y solo en compañía de nuestros convivientes no significa que el espíritu navideño no siga muy vivo y qué mejor para unas Navidades como estas que una buena película.
En la televisión, el cine o los teatros, cada temporada navideña, la figura del Grinch adquiere tanto protagonismo como la del propio Santa Claus. Este año no será la excepción y, además de los espectáculos escénicos que son parte de la agenda cultural de la capital, ‘El Grinch’ también llega a la cartelera cinematográfica con una nueva versión animada.
El Grincho es el Grinch criollo. Pancho Arias interpreta al clásico personaje navideño y le da un sentido quiteño ¿Quién es el personaje detrás del disfraz?
Su mascota no es un perro sino un pericote, vive en el basurero del Inga y desde ahí planea cómo robarse la Navidad, es el Grincho. Este personaje, interpretado por el artista ecuatoriano Pancho Arias, estará en Quito para darle una perspectiva diferente a la Navidad, alejada del consumismo.
El Grincho presentará una obra de teatro en el Centro Comercial Scala y CCI del 18 al 25 de diciembre.
En una de sus tiras cómicas, Quino bromea con el tema de las adaptaciones. Aparecen Mafalda y sus amigos en una confusa tertulia sobre un superhéroe. Uno de ellos lo conoce luego de leer la adaptación al cómic de la película. Otro por haber visto el filme inspirado en la novela. Un tercero por leer la novela basada en el cómic que a su vez fue hecho según la película. A pesar de referirse al mismo personaje, cada uno lo describe de manera diferente. A manera de cierre, la siempre reflexiva Mafalda se pregunta: ¿Por qué nos quieren complicar tanto la vida? Quizás es esta la misma suerte que ha corrido El Grinch, el personaje construido por el escritor estadounidense Theodor Seuss Geisel (conocido como Dr. Seuss). Este ser verde que odia la navidad apareció por primera vez en 1957, en el cuento de Seuss denominado ‘How the Grinch stole Christmas’. Desde entonces ha experimentado un sinnúmero de adaptaciones al cine, teatro y televisión que –en algunas ocasiones– han desdibujado la versió