El presidente de EE.UU., Barack Obama, rindió hoy, miércoles 9 de abril, homenaje a las víctimas del tiroteo ocurrido la semana pasada en la base militar de Fort Hood (Texas), del que dijo que "desgarra heridas aún abiertas" desde que hace casi cinco años se produjo un hecho similar en el mismo lugar.
El militar que el miércoles 2 de abril mató a disparos a tres soldados e hirió a otros 16 en Fort Hood (Texas), y luego se suicidó, era un veterano de la guerra de Iraq que había sido tratado por "problemas mentales", informaron fuentes militares. El general de la Armada Mark Milley expresó que no hay indicios de "actos de terrorismo", aunque aclaró que "no se descarta" ninguna opción.