YouTube salpica sangre estos días. Me refiero a las crueles decapitaciones de los periodistas estadounidenses Steven Sotloff y James Foley y a las ejecuciones masivas de prisioneros, mediante disparos en la cabeza, por asesinos del califato islámico.
Desde 2002 más de una docena de estadounidenses y europeos han sido ejecutados por grupos yihadistas, el más reciente de ellos el periodista estadounidense Steven Sotloff, cuya ejecución por decapitación fue reivindicada por el Estado Islámico en un video divulgado por internet este martes (2 de septiembre de 2014).
Estados Unidos podría haber hecho más por los rehenes occidentales, se lamentó hoy (23 de agosto de 2014) el hermano del periodista James Foley, decapitado esta semana por milicianos del Estado Islámico en Irak, mientras Londres tiene tres sospechosos de haber matado al reportero, y que formarían parte de la célula denominada The Beatles.
Me he quedado abatido y medio roto ante la imagen yihadista que muestra a milicianos ejecutando a iraquíes capturados. En el lado izquierdo de la foto está el pelotón de fusilamiento que dispara de forma indiscriminada en un ritual de muerte, quizás tantas veces repetido que no hay lugar para la reflexión o la misericordia. En el lado derecho está el pelotón de los desgraciados, cuerpo a tierra, arrejuntados como ovejas llevadas al matadero. Sólo uno se vuelve y alza los brazos como pidiendo vida, inútil el grito y el gesto ante el poder de la muerte. Y, en medio, la tierra que no es de nadie, la tierra ensangrentada por el fanatismo ideológico y religioso, por los malditos intereses del poder.
Las autoridades chinas ejecutaron el lunes, 16 de junio, a 13 personas condenados por "ataques terroristas y crímenes violentos# en Xinjiang, en el noroeste del país, indicó la agencia de prensa estatal Xinhua.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) acusó hoy a EE.UU. de contravenir sus obligaciones internacionales, al no haber preservado la vida del condenado mexicano Ramiro Hernández Llanas, ejecutado este miércoles en Texas a pesar de estar protegido por medidas cautelares.
El líder norcoreano Kim Jong-un ordenó ejecutar con un lanzallamas al viceministro de Seguridad Pública, O Sang-hon, como parte de la purga que comenzó a fines de 2013 por alta traición contra varios funcionarios, entre ellos su tío Jang Song Thaek.
Las delegaciones de la Unión Europea en Jerusalén y Ramalá condenaron hoy la pena capital impuesta en Gaza por una corte militar del movimiento islámico Hamas a un palestino acusado de colaboración con Israel.
Toda la familia de Jang Song-thaek, tío y ex tutor del mandatario nocoreano Kim Jong-un, fue ejecutada en un intento de borrar a tres generaciones con origen en la antigua "eminencia gris" de Corea del Norte, "una escoria" que atentó contra el "espíritu revolucionario". Jang, que fuera considerado como número dos del régimen, ya había sido ejecutado el 12 de diciembre. Pero ahora la condena alcanzó también a sus familiares y personas cercanas, incluyendo a niños y funcionarios menores, según la prensa surcoreana.
En Irán fueron ejecutadas en lo que va de año al menos 40 personas, según informó hoy en Londres la organización defensora de los derechos humanos Amnesty International.
Un alto dirigente es destrozado por 120 perros de caza hambrientos. La historia es tan brutal que sólo puede encajar en un régimen de todo el mundo: el de Corea del Norte.
La solución de la problemática de "hipotecas basura" constituye una de las principales reivindicaciones de las plataformas de "indignados" y organizaciones de inmigrantes como la Coordinadora de Ecuatorianos en España. La acción conjunta de estos grupos ha evitado varios desalojos en todo el país.