Nunca sintió nada. Jorge Badillo, de 74 años, recuerda que por causalidad se enteró que era hipertenso. “Nunca había pisado un hospital hasta ese día. Fui por curiosidad, para un chequeo de la próstata y salí con medicinas para la hipertensión”. En el chequeo de rutina el tensiómetro marcó 190/98.