“Nos cansamos de ver cómo les arrebatan los sueños a las niñas que están a nuestro lado, como ni siquiera podemos decidir sobre nuestro cuerpo. Vamos a ser las niñas que queremos ser, vamos a estudiar porque es nuestro derecho. Y no, no nos vamos a callar, porque nacimos gritando, porque nos cansamos de que crean que es normal que una niña cuide a otro niño”.