El crédito educativo cayó 5% entre el primer semestre de este año e igual período del 2020. Es la cifra más baja desde 2018.
Banco del Pacífico es el ente que tiene la mayor parte de la cartera de crédito educativo en Ecuador. Hasta julio del 2020 registraba el 94% del crédito estudiantil. En medio de la emergencia sanitaria, clientes con este tipo de créditos se han quejado por problemas con el diferimiento de pago de sus cuotas, reestructuraciones y refinanciamientos.
Durante la emergencia sanitaria se ha registrado una tendencia de reducción en la colocación de crédito en el país.
La demora en el pago de su salario en este mes puso en apuros a Pilar C., de 39 años. Esta empleada publica debía cancelar los primeros días de abril alrededor de USD 100 del crédito educativo que solicitó para hacer una maestría, pero no contaba con esos recursos.
Antonia Vallejos observa la pantalla de su computador con una mezcla de angustia y asombro: acaba de percatarse de que tendrá que pagar más de veinte millones de pesos chilenos (cerca de USD 25 000) por haber estudiado una carrera universitaria en Chile.
La políticas de fijación de techos a las tasas de interés para los créditos en la banca derivó en menos colocaciones durante los últimos nueve años.
La deuda de David supera los USD 20 000, producto de un crédito educativo que sacó para estudiar una de sus pasiones: el cine. El joven – relata su padre Carlos Jaramillo– pagó el monto durante dos años pero luego cayó en proceso de coactiva. Para casos como el de este quiteño, el Gobierno presentó el Crédito Educativo Social, un proyecto que busca dar alternativas emergentes a los jóvenes que optaron por un préstamo para financiar su educación superior pero no lograron cancelar las cuotas.
Más de 1 000 personas que accedieron a un crédito educativo y no lograron cancelar sus deudas tendrán la posibilidad de seguir un proceso de refinanciamiento de hasta 20 años. Tendrán algunos beneficios como seis meses de gracia y 7,5 % de interés. Esta alternativa llamada crédito educativo social fue anunciada por el presidente Lenín Moreno.
Con el objetivo de solucionar las dificultades de pago de estudiantes que sacaron un crédito para sus estudios, el Gobierno presentará el denominado ‘crédito educativo social’. El evento contará con la presencia del presidente Lenín Moreno y se desarrollará este martes 23 de julio del 2019 en la explanada del Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo, en Guayaquil.
Fabricio es profesional. Tras graduarse en una universidad de Quito, decidió perseguir su sueño de viajar al extranjero y estudiar una maestría.
Pedro e Isabel –nombres protegidos– tienen una preocupación: no pueden pagar los créditos que sacaron para estudiar. La falta de trabajo es uno de los factores que inciden. Ambos piden a las autoridades que se les brinde una facilidad de pago.
En los meses previos al inicio de clases en las universidades, la demanda de créditos para estudios aumenta. Esa es una de las opciones para quienes no obtienen cupos en instituciones de educación superior públicas, tras rendir el examen Ser Bachiller.
El padre de un bachiller calcula el monto de dinero que necesita pedir, a modo de crédito educativo, en el Banco del Pacífico. Un asesor le indica que debe presentar una copia de sus estados de cuenta de los tres últimos meses. Si mantiene deudas en cooperativas, mutualistas o el Banco de Fomento, requiere un certificado de solvencia.
Las autoridades realizaron modificaciones en las reglas para entregar créditos educativos en el Ecuador. Los ajustes se hicieron a los montos, requisitos, período de gracia, y el tiempo de pago.
Desde noviembre del año pasado, que el Banco del Pacífico entrega créditos educativos, en alianza con el Instituto Ecuatoriano de Crédito Educativo y Becas (IECE).