A las 9:20 de este 24 de marzo del 2016, se inició una audiencia en la Junta Metropolitana de Protección de Derechos de Quito.
Los estudiantes del Colegio Nacional Juan Pío Montúfar, que fueron vinculados en la investigación por las manifestaciones del 15 y 16 de febrero, no perderán el año. Las sanciones que se establecieron a los jóvenes van desde la suspensión hasta la reubicación a otro establecimiento educativo fiscal.
Hoy, miércoles 23 de marzo del 2016, por medio de un tuit, Gonzalo Criollo, dirigente estudiantil del Colegio Juan Pío Montúfar, ubicado en el sur de Quito, expresó su tristeza por la decisión tomada por la Junta Distrital de Resolución de Conflictos de la Dirección Distrital de Educación. En el documento se expresa que será reubicado a otra institución educativa.
La notificación llegó la mañana de este martes, 23 de marzo de 2016, al correo electrónico de Gonzalo Criollo. Él fungía como presidente y estudiante del Colegio Nacional Juan Pío Montúfar, de Quito.
Los 22 estudiantes del Colegio Montúfar, que fueron suspendidos tras las manifestaciones de febrero pasado, aún esperan las decisiones administrativas que les permitan volver a clases.
Unos 40 estudiantes del Colegio Nacional Juan Pío Montúfar participaron de la marcha de este jueves, 17 de marzo del 2016. En la avenida 10 de Agosto y Bogotá los alumnos elevaron gritos de protesta, mostraron banderas y afiches con sus consignas de manifestación.
Cada sábado llegan con azadones y palas. De 07:00 a 11:00 limpian la maleza de un terreno que está junto a la quebrada del río Machángara en La Recoleta, un barrio del centro de Quito.
Una docena de docentes, en representación de los 15 profesores reubicados del Colegio Juan Pío Montúfar y de los 17 maestros suspendidos tras las protestas realizadas el lunes 15 y martes 16 de febrero, brindaron una rueda de prensa la tarde de este martes, 15 de marzo del 2016, para contar su versión de lo ocurrido. El asambleísta José Ricardo Moncayo los acompañó en el área de Comunicación de la Asamblea Nacional.
Los padres de familia de los estudiantes suspendidos del Colegio Montúfar se autoconvocaron la mañana de este viernes 11 de marzo en las afueras del plantel educativo, en el sur de Quito. Ellos confían en que las autoridades de Educación declaren inocentes a sus hijos, pero en caso de que no sea así, se preparan en el ámbito legal.
Al menos por 15 días más, los 22 estudiantes del Colegio Montúfar no regresarán a las aulas. Así, lo indicó la tarde de este jueves 10 de marzo del 2016, Gonzalo C., presidente del Consejo Estudiantil de ese establecimiento. El adolescente, acompañado de su madre y abogado particular, participó de la audiencia dispuesta por el Ministerio de Educación. Vestido de terno y frente a la puerta principal de la institución contó que este procedimiento se realizó en el Rectorado del plantel y duró cerca de una hora.
A las 15:30 de este jueves 10 de marzo del 2015 llegó a las instalaciones del Colegio Montúfar la concejala Carla Cevallos. Al arribar al plantel estudiantil, la edil habló con los medios de comunicación y dijo que su presencia en la institución es como veedora en las audiencias que se realiza dentro del plantel, para analizar el reingreso de estudiantes que fueron sancionados por las manifestaciones ocurridas en febrero pasado.
La historia empezó el pasado 16 de febrero. En las inmediaciones del colegio Montúfar de Quito, sobre la avenida Napo, se realizaban protestas por la restructuración interna que se daba en el colegio. Luego de manifestaciones violentas se retuvo a 22 menores de edad y a un adolescente más: un chico de 17 años del colegio UNE.
Los padres de familia del Colegio Montúfar no descansan en el proceso de exigir el derecho para que sus hijos vuelvan a las aulas. La mañana de este miércoles 9 de marzo del 2016 se realizó una rueda de prensa en la que señalaron que tomarán tres medidas, junto con instituciones de protección de adolescentes, para lograr su objetivo.
La polémica por la suspensión de 22 estudiantes del Colegio Juan Pío Montúfar continúa. La mañana de este miércoles, 9 de marzo del 2016, el ministro de Educación, Augusto Espinosa, cuestionó la resolución de la Junta Metropolitana de Protección de la Niñez y Adolescencia, que solicitó la reintegración inmediata, a las clases normales, de los alumnos involucrados.
En la puerta del Colegio Montúfar estuvieron un inspector de la institución y un funcionario del Distrito Educativo Eloy Alfaro. Las miradas se centraban en las caras de los chicos que ingresaban antes de las 07:00 de este martes 8 de marzo a la institución. La consigna fue impedir el paso de los 22 estudiantes suspendidos a las aulas.
La mañana del lunes 7 de marzo los estudiantes suspendidos del Colegio Montúfar fueron sacados del aula de clases. Esto, pese a que existe una resolución de la Junta Metropolitana de Protección de Derechos de la Niñez y Adolescencia que ordenó que los alumnos asistan, de inmediato, a clases regulares.
18 de los 22 alumnos del Colegio Montúfar, que estaban suspendidos tras las manifestaciones violentas registradas hace tres semanas, retornaron a clases la mañana de este lunes 7 de enero, tras permanecer 15 días suspendidos.
22 estudiantes del Colegio Juan Pío Montúfar continúan suspendidos. Los alumnos no pueden asistir a clases mientras se realiza un proceso administrativo para determinar su responsabilidad en las protestas del 15 y 16 de febrero y se resuelve la sanción definitiva. Sin embargo, la Junta Metropolitana de Protección de los Derechos de la Niñez y Adolescencia determinó que los involucrados se reintegren de inmediato a clases.
Definitivamente, no creía lo que estaba mirando en la TV. Estudiantes del prestigioso Colegio Juan Pío Montúfar, que antaño se preciaban de “señores”, ahora en pleno siglo XXI “estos chicos valientes” actuaban con saña y crueldad, propias de individuos sin conciencia ni moral, con el alma llena de maldad. Parapetándose en el anonimato demostraban su cobardía, para atacar a un grupo de ecuatorianos que trabajan como policías y hacen presencia en los conflictos sociales para precautelar el orden y la seguridad de los ciudadanos. Y llega al clímax la barbarie cuando el grupo de policías pretendiendo protegerse de los ataques de piedras se encuentra arrinconado en el portón del colegio, donde de la manera más aleve es objeto de prácticamente una “lapidación”, del modo como nos relatan los ejemplos bíblicos. Piedra por todos los costados y con molones de construcción, lanzados desde la parte superior del portón hacia abajo, con fuerza y afinando la puntería por parte de “los chicos valiente
El futuro de los estudiantes suspendidos del Colegio Montúfar se definirá tras las audiencias que comenzaron esta semana. Se trata de un proceso administrativo y disciplinario en contra de los alumnos que supuestamente participaron de las protestas violentas que se registraron el lunes 15 y martes 16 de febrero.