Un cóctel tradicional de margarita se convierte en un espectáculo con sabores ahumados que crean una nueva versión para paladares que disfrutan de los sabores fuertes.
Con base de vodka y vino espumante el cóctel combina manzanas para una experiencia de sabores únicos y refrescantes.
En la elaboración del cóctel Mimosa Ruby Red el vino espumante se combina con sabores afrutados para un cóctel nocturno. Una bebida que sirve para realizar un brindis en familia.
Hoy se llevó a cabo el segundo día del evento Bar Academy organizado por el colectivo Bartenders UIO. Hasta las 13:00 se dictaron charlas magistrales como la de Andrés Oña sobre la asociación de sabores en la coctelería o la del colombiano Miguel Martínez sobre la elaboración artesanal de licores y los cocteles con esta base.
Cae el mediodía, el almuerzo transcurre normalmente y al final un toque dulce no puede faltar en el goloso paladar quiteño. Entre masas y caramelos, los helados son una opción refrescante, más aún si llevan la consistencia de un coctel.
Bebidas ancestrales como la chicha o tradicionales como el canelazo son algunas de las más antiguas que identifican al Ecuador. Sin embargo, aunque lleven alcohol y otros ingredientes que alteran el sabor original, no han sido denominadas cocteles, sino difundidas como bebidas locales.
Las bebidas son el elemento que, casi siempre, están presentes en las reuniones sociales. Para una buena conversación con amigos, familia y conocidos son el acompañante ideal que actúa como ‘inhibidor’ para liberar tensiones y dejar fluir la conversación.
Se pone en una coctelera con bastante hielo 2 onzas de pisco, 1/2 onza de jugo de limón 3/4 de onza de azúcar blanca y 1/3 de clara de huevo se agita la coctelera y después se cierne. Puede combinarse con jugo de maracuya o fresa y un poco de canela en la decoración.
Para su elaboración se debe colocar en una coctelera hielo, una onza de vodka, 1/4 de onza de jugo de limón y 1,5 onza de cramberriers o jugo de arándanos. Se debe servir en un vaso de martini más una taja de naranja.
El trago típico cubano se prepara con hojas de menta o hierba buena más cinco cucharadas de azucar morena. Un mortero aplasta el contenido con cuatro limones. Finalmente de agrega hielo picado, ron cubano y agua mineral o gaseosa de limón.
Se prepara con Ginebra, más agua tónica hielo y limón. En ocasiones suelen reemplazar al limón con la naranja
Se prepara echando limones cortados más azúcar. Se aplasta con un mortero para combinar el jugo con hielo picado y finalmente se agrega Cachaza (ron brasileño).
Con los equipos disfrutando de la canchas de Brasil, quienes no pueden estar en la tierra carioca pueden hacerse de sus más deliciosos cócteles, aquí en la ciudad.
El Floridita, un restaurante-bar en La Habana con una estatua de Ernest Hemingway en su barra que invita a tomar el cóctel Daiquiri, preferido del escritor, atrajo en 2013 a 100 000 clientes, cerca ya de cumplir 200 años.
Para armarse un coctel ahora solo basta un poco de alcohol en polvo y agua. Esta propuesta de la empresa Lipsmark ha sido aprobada por la Oficina de Comercio e Impuestos al Alcohol y Tabaco en EE. UU.
El Agua Tomebamba, Julián Matadero, el Taita Carnaval, el Yasuní y Cuenca Libre son parte de la oferta de cocteles que se ofrecerán en la capital durante las fiestas de fundación, que se conmemorarán este sábado 12 de abril de 2014. Los propietarios de bares y restaurantes decidieron hacer un homenaje a la ciudad y a la reserva del Yasuní. El resto tiene nombres alusivos al patrimonio e íconos urbanos de Cuenca. Estos cocteles tienen tonalidades fuertes como rojo, verde y naranja y ahora se ofertan en las fiestas de fundación de la capital azuaya. Pero el licor tradicional de la ciudad desde el siglo XVI, de acuerdo con datos históricos, es el denominado punta y con este se preparaba el canelazo. Según el historiador y cronista vitalicio, Juan Cordero, dice que la preparación de esta bebida se basa en la naranjilla, canela, azúcar y aguardiente.
El delicioso aroma frutal y una mezcla equilibrada de licores convierten al coctel en una tentación difícil de escapar.
Culminó febrero y con él se acabaron las celebraciones del cóctel bandera de Perú: el pisco sour. Sin embargo, existe una variedad de mezclas y secretos que permiten aprovechar mejor del destilado peruano.
Seguir la ruta gastronómica del Nobel de Literatura por la obra ‘El viejo y el mar’ traslada a sitios como Pamplona, Navarra, París o Cuba. Pero el capitán de la llamada Generación Perdida, Ernest Hemingway, más que comer, bebía y más que dormir, escribía.
De aperitivo o digestivo a la barra y al disfrute, los tragos herbales se dan cita tanto en discotecas como en restaurantes.