Dos familias perdieron a dos pequeñas niñas en el accidente del pasado viernes en el sector de la Crespa, en la vía El Carmen-Flavio Alfaro. Los familiares que sobrevivieron a la catástrofe se recuperan en la clínica Cuba Center de Santo Domingo, en el km 7 de la vía a Quinindé.
Una de las pequeñas fallecidas se llamaba Melisa Domínguez, de 18 meses. Viajaba en los brazos su madre Diana Quintero y su hermana Karen de 4 años. Las dos sufrieron fuertes golpes. Sus ojos quedaron hinchados, el rostro se tornó de color verde y morado.Madre e hija se recuperan en la sala 205 de la clínica cubana. En una de las camas, Diana Quintero permanece inconsciente. Su hermana Ligia comentó que tiene una inflamación en el cerebro. “Mi hermana aún no se entera de que su pequeña hija falleció”. Los sobrevivientes contaron a la familia Quintero que la bebé falleció porque una persona adulta le cayó encima dentro del bus.
En otra cama está la niña Melissa. La pequeña se despierta por momentos y se queja de los dolores. Ella es asistida por su padre Jacinto Quintero. En su rostro se refleja el dolor por la muerte de su niña. Diana Quintero y sus dos hijas partieron desde Quito y debieron llegar a Briceño (San Vicente, Manabí). Ahí las esperaba su madre Hipatia Arteaga. Ella se empezó a preocupar cuando la unidad número 57 de la cooperativa reina del Camino no llegó a las 05:00 a Briceño. Una hora más tarde escuchó por la radio que había sucedido el accidente.
Arteaga se contactó con su hija Ligia. Ella contó que fue difícil confirmar si su hermana viajaba en el bus accidentado. El problema se presentó porque los pasajes estaban a nombre de Alexandra Domínguez, otra de los familiares que se transportaron en la cooperativa Reina del Camino.
En la misma clínica, pero en la habitación 203 permanecía hasta ayer Anthony Alcívar Mitte de 8 años. Él fue dado de alta por los médicos de Cuba Center.
El rostro de Antony presenta varios cortes y moretones. El chico contó que los vidrios le saltaron a su rostro y por poco le afecta sus ojos. En su cabeza de cabellera rubia tiene una suturación de 11 puntos. “Los médicos me sacaron pedazos de vidrio de la cabeza y la cara”, cuenta el pequeño.
Anthony viajaba con su madre Elva Mite de 33 años. Ella llevaba en sus brazos a su hija Antonela Alcívar de 6 meses. “La pequeña falleció en los brazos de su madre porque así la encontraron” durante el rescate de las víctimas, contaron sus familiares.
Las familias de las dos víctimas decidieron que Anthony les acompañara a los funerales el pasado sábado, pero el pequeño no quiso presenciar las honras fúnebres y pidió que lo regresen a la clínica. El infante salió de esta casa de salud ayer.
Ambas familias cuestionaron a la falta de control policial en diferentes lugares por donde pasó el bus. “Son responsables de las vidas perdidas, dirigentes de la cooperativa, propietarios de la unidades, conductores, policías de la terminal de Quito y de los peajes en la vía Aloág-Santo Domingo que permitieron la circulación del bus con 83 pasajeros”, dijeron.