Japón volvió a cazar ballenas ante su costa noreste el pasado sábado, supuestamente con fines científicos, como parte de su captura anual en el Pacífico que durará hasta comienzos de junio, informó el Ministerio de Pesca citado por medios locales.
La flota ballenera japonesa, que acaba de regresar de la Antártida, mató a 251 cetáceos, informó hoy a dpa el Ministerio de Pesca de Tokio.
Luego de corto tiempo, cerca de nuestras playas tendremos a la vista ballenas. Nuestro mar es el lugar ideal para su reproducción.
Ante la decisión de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), de prohibir a Japón la caza de ballenas en el océano Antártico, el Gobierno japonés dijo que estudia cuidadosamente el fallo de este organismo y aunque acatará la decisión, dejó la puerta abierta a futuros programas.
Japón debe detener la caza de ballenas en el océano Antártico, ordenó ayer (31 de marzo de 2014) la Corte Internacional de Justicia (CIJ), al estimar que Tokio realiza la actividad comercial haciéndola pasar por científica.
Un fósil de ballena de 28 millones de años de antiguedad descubierto en Estados Unidos demuestra que la ecolocación o capacidad de orientarse por sonidos surgió pronto entre los cetáceos, informa hoy la revista "Nature". Un equipo del Instituto de Tecnología y Colegio de Medicina Osteopática de Nueva York, dirigido por Jonathan Geisler, examinó las características del fósil del oligoceno hallado en Carolina del Sur, que corresponde a un género hasta ahora desconocido de ballena dentada, las que actualmente tienen la capacidad de ecolocación. El descubrimiento de este fósil "indica que la ecolocación se desarrolló muy tempranamente cuando se produjo la divergencia entre las ballenas dentadas (que incluyen a las orcas, delfines, marsopas y cachalotes) y las barbadas de su antecesor común", explica la revista. La adquisición de la capacidad de ecolocación permitió adaptarse a su entorno a aquellos cetáceos -los dentados- que vivían en aguas oscuras o turbias, donde era más difícil navegar
Las imágenes satelitales en alta resolución podrían convertirse en la herramienta del futuro para contar poblaciones de ballenas y ayudar en su conservación, según un estudio realizado por la British Antarctic Survey y publicado en la revista Plos One.
Un grupo internacional de científicos dijo hoy que ha desarrollado una guía para que las compañías petroleras que realizan exploraciones oceánicas puedan reducir el impacto de sus operaciones, especialmente sondeos sísmicos, en mamíferos marinos.
Expertos, ecologistas y voluntarios lucharon hoy, 19 de enero, para devolver al mar a 48 ballenas piloto que encontraron varadas en una bahía de Nueva Zelanda, pero estas, después de nadar unas horas, volvieron a tierra.
Ocho de las 13 ballenas que quedaron varadas en una playa de la bahía Golden, en la Isla Sur de Nueva Zelanda, pudieron ser empujadas de nuevo al mar por guardabosques y voluntarios, pero otras cinco murieron en la arena.
Las autoridades de Nueva Zelanda anunciaron hoy, miércoles 15 de enero de 2014, que sacrificarán a las ocho ballenas piloto que intentaron devolver varias veces al mar desde que se quedaron varadas el martes en una playa de la bahía Golden, en la Isla Sur del país.
Como una medida de conservación, en 1986 la Comisión Ballenera Internacional (CBI) prohibió la caza de ballenas con la excepción de las minorías étnicas, como los chukchi rusos o los inuit canadienses, cuya subsistencia depende de la captura de esos cetáceos.
Ayer fueron difundidas las fotografías de tres ballenas Minke muertas. Aparecen sobre la cubierta del buque de factoría nipona Nisshin Maru, en la Antártida.
Las redes y las embarcaciones más antiguas que sirven para pescar en Esmeraldas se guardan durante la temporada de avistamiento de ballenas. Esta comenzó en julio y se prolongará hasta mediados de septiembre.
Un grupo de oceanógrafos y zoólogos siguieron durante tres meses el “canto” de las ballenas azules del Antártico con nuevos sistemas acústicos para estudiar su migración y evaluar la población de esta especie, diezmada por décadas de caza. La expedición, formada por científicos australianos, estadounidense y británicos, siguió de enero a marzo el movimiento de las ballenas en las aguas del Antártico analizando en tiempo real sus “cantos” a baja frecuencia. “La acústica nos llevó a las ballenas”, explicó la científica australiana Virginia Andrews-Goff. Este sistema de seguimiento, que ya se utiliza en otras partes del mundo, supone un avance para localizar a las ballenas en el océano, que hasta ahora se hacía identificando visualmente a los animales, una tarea que podía tardar días o incluso semanas. Los científicos reunieron un total de 626 horas de grabaciones que incluyen 26 545 sonidos emitidos por ballenas. Luego fotografiaron a los animales, tomaron muestras para identificarlos y
Las ballenas rorcuales disponen de un órgano sensorial que les permite detectar sus presas y coordinar los movimientos de la mandíbula durante los ataques, según un estudio publicado en la revista británica "Nature". Este grupo de cetáceos, conocidos también como ballenas de aleta, -que incluye especies como las ballenas azules, las jorobadas o las minke- puede consumir hasta 1 800 kilogramos de comida al día, en un proceso en el que engullen y filtran grandes volúmenes de agua con presas y en el que este órgano sensorial desempeña un papel fundamental. "Esta es la primera vez en muchas décadas que se descubre un nuevo órgano sensorial en un mamífero. Esto ilustra también lo poco que sabemos sobre la anatomía de las ballenas", explicó Nicholas Pyenson, el investigador principal y autor del artículo. En cada ataque, las ballenas aceleran sus movimientos hasta su máxima velocidad y abren la boca hasta alcanzar un ángulo de casi noventa grados. El órgano descrito en el artículo está situa
Un estudio científico ha constatado un aumento de ballenas azules en las costas del sur de Chile, donde entre enero y abril aprovechan la gran cantidad de krill que se produce en esa zona del Pacífico para alimentarse. Aunque el mamífero más grande del planeta se mantiene como una especie en peligro de extinción, científicos del Centro Ballena Azul de la Universidad Austral de Chile han avistado cerca de 115 grupos de estos cetáceos a pocas millas de la costa de Valdivia, 835 kilómetros al sur de Santiago. Según explicaron hoy Rodrigo Hucke y Jorge Ruíz, responsables de la investigación, los resultados obtenidos son significativos ya que permiten estimar que la especie ya no sólo se alimenta de los cuantiosos nutrientes que se producen en las aguas del archipiélago de Chiloé, 300 kilómetros al sur de Valdivia. "Lo que estamos viendo al extender hacia al norte nuestras prospecciones es que tenemos una área de alimentación más grande de lo que pensábamos y eso son 600 kilómetros lineales
Los constantes ataques de las gaviotas a las ballenas que cada año llegan a la zona del Golfo Nuevo, en la Patagonia argentina, unos 1.500 kilómetros al sur de Buenos Aires, provocan inquietud entre los científicos por sus graves consecuencias en salud de los cetáceos, que podrían mudarse a otros lugares de la costa, terminando así con un importante recurso turístico.