Carlos Bastidas (padre) y Liliana Touma, padres de Carlos Bastidas, recuerdan el hecho del fallecimiento de su hijo el 12 de mayo del 2011.
Sharon Bridgman y su marido, Tim, comenzaron en Tierra del Fuego, Argentina una travesía en bicicleta que terminaría en Alaska, a través de la cual planeaban recorrer todo el continente, como ya habían hecho en Europa y África.
Bartolomé Balón (45) vestía la camiseta del Barcelona cuando fue atropellado en la calle Toledo, norte de Quito. Mientras realizaba los trámites para retirar el cuerpo de la morgue, su hijo Luis Miguel, contaba que quería festejar el título de este año. “Siempre que el ‘Ídolo’ jugaba se ponía la amarilla”. En la mañana de ayer, la esposa de Bartolomé lloraba en las afueras de Medicina Legal.
El Juez Séptimo de Tránsito dictó prisión preventiva para el chofer del camión que atropelló a Arturo Chicaiza, estudiante del Colegio Jorge Mantilla. Además, dispuso la retención del camión, el retiro de la licencia de conducir y se inició la instrucción fiscal por atropellamiento.
Un ataúd blanco y cuatro veladoras encendidas resguardaban el cuerpo de Arturo Chicaiza, el niño que ayer murió luego de haber sido atropellado en la avenida Simón Bolívar. Esta mañana, la capilla ardiente se mantenía en la casa comunal de la iglesia de El Cisne, en la Lucha de los Pobres, sur de Quito. En bancas de madera y sillas de plástico estaban los familiares y vecinos que acompañaron a Arturo, durante toda la noche, en su último adiós. Arturo Chicaiza Reyes, abuelo del joven y con quien vivía, en medio de su dolor no dejaba de exclamar que ayer, antes de dirigirse al Colegio Jorge Mantilla, su nieto no se despidió con un beso en la mejilla, como siempre lo hacía. “Mi negrito me dio un beso en la boca y se fue”. Una botella de licor y un vaso de agua de canela trataban de calmar el clamor que esta mañana se expandía en la sala donde hasta mañana permanecerá el cuerpo de Arturo, recordado como el más alegre del octavo “D”. A Graciela Coello, abuela de Arturo, las manos no le deja
Elena García está desesperada por la salud de su hijo Jesús Loor, de 4 años. El niño fue atropellado hace dos meses en el sector de Tarapoa, en Sucumbíos. Actualmente, el menor está en el hospital Baca Ortiz de Quito y su estado es preocupante. Su madre detalló que el pequeño Jesús no puede mover ninguna parte de su cuerpo. Los médicos informaron a la mujer que el niño, si llega a sobrevivir, quedaría en estado vegetal para toda su vida. Los galenos alimentan al menor mediante una sonda. Los daños por el atropellamiento fueron tan graves, que tiene una de su pierna destrozada. Además, tiene una costilla salida y, según explicó Elena García, una parte del cerebro del menor habría sido removida porque tenía sangre en su cráneo.
Cerca de las 05:40 de hoy, un hombre falleció al ser atropellado en la av. Gonzalez Suárez, en el norte de Quito. Un uniformado de la UPC La Floresta Alta, ubicada cerca del lugar del atropello, informó que el hecho ocurrió cuando la víctima trotaba por la av. Gonzalez Suárez, a la altura del edificio Atrium, a cinco cuadras del redondel Churchill.
Flor Uyunkar, de 25 años, madre de los dos niños que fallecieron el domingo pasado luego de que un auto los atropellara en la av. Galo Plaza, fue trasladada al Hospital Carlos Andrade Marín.
Flor Uyunkar, madre de los dos niños que fueron atropellados el pasado domingo en Carcelén, aún permanece en el Hospital Eugenio Espejo. Los médicos ya la amputaron su brazo izquierdo y ella todavía no se entera que los niños fallecieron y fueron enterrados pasado el mediodía de este martes.
Los dos niños que fueron atropellados en la tarde del domingo mientras permanecían sobre una acera, en el norte de Quito, fueron enterrados pasado el mediodía de hoy.