La historia del pueblo afrodescendiente se difunde en la Sala Etnográfica Nuestros Ancestros de la parroquia Santa Catalina de Salinas, ubicada en el norte de Ibarra.
Con el objetivo de difundir la cultura afroecuatoriana en Quito, mañana (21 de diciembre del 2018) se realizará la primera edición del Afro Arrullón Navideño. Este concierto también tiene fines benéficos.
‘De marimbos de la Tunda’ es el nuevo libro que está en promoción en diferentes ciudades del país y que reseña una parte de la cultura musical del pueblo afro y de sus personajes míticos.
Cuatro instituciones educativas del sur de la ciudad de Esmeraldas participan del concurso de poesía afro que empezó en su primera fase con la participación de 16 estudiantes.
Instrumentos musicales como el bombo, el cununo y el yembe. La diversidad de colores en su vestimenta como los faldones amplios y largos y pantalones de tela remangados.
Un bombo, un cununo y un yembe rodean un arreglo floral que tiene, en primer plano, dos mapas: uno de Ecuador y otro del continente africano. Esos instrumentos son tradicionales de la cultura afro y se usaron para dar apertura al I Festival Multicultural Ubuntu en Guayaquil.
Diez generaciones han pasado por la escuela de la agrupación cultural Jolgorio Internacional, dirigida por el maestro Santiago Mosquera. Él ha dedicado 50 años de su vida a la difusión de la cultura del pueblo afroesmeraldeño.
Cerca de 30 retratos de jóvenes afroquiteños son parte de la muestra fotográfica ‘Entre Pieles y Cabellos’, que se podrá visitar en el Centro de Investigación de la Memoria y el Patrimonio del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), ubicado en la Jerónimo Carrión y León Vivar, hasta el 31 de octubre del 2018.
Las trenzas en los cabellos de las mujeres afros cuentan historias. Esos secretos que trajeron los afrodescendientes que arribaron de Colombia a Ecuador, tras la abolición de la esclavitud en el último país, son materia de investigación.
Los habitantes del valle del Chota no terminaban aún de celebrar que Nicole Ocles fuese elegida representante de Ecuador a Miss Mundo, cuando Andrés Padilla, otro hijo de esta localidad afro, murió en un confuso incidente con la Policía.
Poco más de 200 familias afrodescendientes e indígenas del suroeste de Colombia se vieron forzadas a dejar sus comunidades por amenazas y choques que involucran a guerrilleros disidentes de las FARC, informó este martes 4 de septiembre del 2018 la oficina local de asuntos humanitarios de la ONU.
La edición XIV del Festival del Canalete de Oro se celebra en Esmeraldas desde hace 14 años como una forma de reconocer el trabajo de quienes promueven las tradiciones del pueblo afroesmeraldeño.
La reivindicación por la presencia de los afrodescendientes en los museos está en plena efervescencia en países como Estados Unidos. Uno de los ejemplos de este fenómeno es ‘Apeshit’, un videoclip que hasta ayer tenía más de 92 millones de visitas en YouTube y en que los músicos Beyoncé y Jay-Z deambulan por el Museo del Louvre mientras reclaman, de una manera desenfadada, un lugar para la identidad negra en la historia del arte.
El pueblo afrodescendiente empezó a conocer una normativa legal que apunta a erradicar la discriminación racial. Se trata de un proyecto que nace del Plan Plurinacional para Eliminar la Discriminación Racial, aprobado en el 2009, mediante el Decreto Ejecutivo No. 60. Pero en la práctica este instrumento ha sido poco aplicado debido a la escasa inclusión laboral en las instituciones y la falta de políticas educativas para reconocer a los afrodescendientes.
Las mujeres afros de San Lorenzo ponen a prueba su talento para trabajar en temas artesanales, mediante el diseño de bisuterías con materiales del medio y de los que adquieren en el mercado.
El espacio que tiene la marimba en la cotidianidad de Esmeraldas hace que este arte se mantenga latente en los afrodescendientes. Es una forma de narrar el día a día y las costumbres de este pueblo a través del folklore que se manifiesta en la música, entonación de los instrumentos, cuentos y mitos.
En el salón de actos de la Casa de la Cultura de Esmeraldas se exhiben 22 obras pictóricas que muestran parajes del pueblo afroesmeraldeño y paisajes principalmente del norte de la ‘Provincia Verde’.
La equidad de género, el acceso al empleo, tierra y agua son las principales necesidades de los afrodescendientes del territorio ancestral de las provincias de Imbabura y Carchi.
El grupo afrocultural Filomena Corozo es reconocido por sus 40 años de trayectoria cantando arrullos, chigualos y alabaos en los barrios populares de Esmeraldas.
Quince años han transcurrido desde que un grupo de maestras de la unidad educativa Dr. Olmedo Portocarrero decidieran crear una escuela de danza tradicional para conservación de la cultura afroesmeraldeña.