San Francisco guarda más secretos que la leyenda de Cantuña. Al cruzar el umbral de la puerta del convento, se deja atrás el bullicio de la plaza para someterse al esplendor de la arquitectura y del arte barroco. Amplios corredores, que forman un inmenso cuadrado perfecto, atraen por sus pilares de piedra tallada.
Este feriado puede ser un buen pretexto para recorrer las siete maravillas de Quito. Si su intención es viajar, vaya a la Estación de Ferrocarriles de Chimbacalle y compre un boleto para un tour hacia El Boliche.
Hoy concluye la votación para elegir las Siete Maravillas del Patrimonio de Quito. La elección se realiza en el marco del nombramiento de la ciudad como Capital Americana de la Cultura 2011.