La preemergencia se decreta cuando las estaciones de monitoreo marcan que el nivel de polución está entre 300 a 499 microgramos de partículas nocivas por metro cúbico. Foto Referencial: Wikicommons
Santiago vivirá el sábado 2 de julio de 2016 por segunda jornada consecutiva bajo preemergencia ambiental, la duodécima en lo que va del año, debido a los elevados niveles de polución, informó este viernes 1 de julio la Intendencia (gobernación) de la capital chilena.
La medida tomada “debido a las malas condiciones del aire” , según la misiva difundida por las autoridades, restringe cerca de un 20% la circulación vehicular, sacando de las calles a unos 300 000 rodados.
Además se prohíbe el uso de estufas a leña, se paralizan las fuentes fijas industriales y se aconseja suspender la actividad deportiva al aire libre.
La preemergencia se decreta cuando las estaciones de monitoreo marcan que el nivel de polución está entre 300 a 499 microgramos de partículas nocivas por metro cúbico.
Por encima de 500 se decreta la emergencia, aumentando la restricciones, lo cual ocurrió el pasado lunes, por primera vez en el año.
Santiago sufre en invierno altas concentraciones de polución en el aire debido a su condición geográfica, al ser un valle enclavado entre cerros y la imponente Cordillera de los Andes.
Los anuncios meteorológicos pronostican lluvias para el domingo 3 de julio, lo que sería una bendición para los más de 7 millones de habitantes de la ciudad, ya que las precipitaciones provocan una mejora en la calidad del aire.