Imagen referencial. En Ecuador, distintos planteles han presentado sus planes piloto para el regreso a clases presenciales, con protocolos de bioseguridad por el covid-19. Foto: EFE
El familiar de un estudiante, que acudía a clases presenciales en un plantel particular de Quito, contrajo covid-19. Por lo que el colegio, que desarrolla su plan piloto de retorno progresivo desde la última semana de septiembre, activó los protocolos.
La ministra de Educación, Monserrat Creamer, confirmó el caso a EL COMERCIO, este viernes 30 de octubre del 2020, y señaló que se activaron de manera inmediata los protocolos respectivos. Se aplicaron, detalló, medidas de aislamiento en el plantel, mismo que se comunicó con familias y docentes. “Hasta el momento no hay evidencia de contagio en ningún estudiante ni docente”, dijo.
El protocolo a seguir en estos casos establece la verificación del diagnóstico, el cerco epidemiológico y el monitoreo, señaló el ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos. Esto, comentó, lo coordina la Cartera con las instituciones educativas.
En este caso, con la confirmación de un familiar contagiado, lo primero es verificar si el niño que tuvo contacto con esa persona también resulta positivo para el coronavirus, explicó Zevallos. Si esto se ratifica se deberá definir cuántos de sus compañeros y profesores tuvieron contacto con él para establecer los cercos y luego determinar si tienen covid-19. No será necesario el cierre del plantel, precisó el titular de Salud.
Este Diario buscó la versión del establecimiento particular, sin embargo, sus autoridades dijeron que no contestarán, que el tema estaba en manos del Ministerio de Salud. No se conoce cuántos alumnos están en este momento en clases presenciales, de qué niveles educativos, tampoco el número de profesores. Solo que, según Educación, se han seguido los protocolos.
La mayoría de centros particulares se encuentran realizando su Plan Institucional de Continuidad Educativa (PICE). Cada institución plantea acciones diferentes para cuando se presente un caso entre quienes asisten presencialmente, dijo Teodoro Álvarez, vicepresidente de Corpeducar, gremio que agrupa a 20 planteles de Quito.
Álvarez es rector del Tomás Moro. Así que indicó, que por ejemplo, en su caso, cuando empiecen el retorno progresivo a clases presenciales formarán grupos de convivencia, conformados por alumnos de un grado, no tendrán ningún contacto con otros ni en el aula ni en áreas externas a ella.
Cada grupo tendrá, por ejemplo, su propia área de lavabos y baños en áreas de circulación. Esto, explicó el rector, permitirá que, si se confirmara un caso de covid-19 se suspenderá la asistencia de los integrantes del aula.
La última semana de septiembre volvieron a las aulas alumnos del SEK Los Valles y Quito, además del Colegio Pachamama, luego de que el COE Nacional aprobara sus planes piloto de retorno progresivo. En las últimas semanas también se aprobaron los planes de otras instituciones particulares de Quito Albert Einstein, José Engling, EMDI School y Colegio Alemán.
Estos afinan detalles para la vuelta a clases presenciales de los estudiantes, previo un proceso de consulta con sus padres de familia, ya que no es obligatorio que escojan esa opción. El Einstein y el EMDI, por ejemplo, prevén que el retorno progresivo empezará después del feriado por el Día de los Difuntos, del martes 3 de noviembre del 2020.
Entre las instituciones educativas fiscales hay una lista más amplia de centros con planes piloto aprobados para el retorno progresivo. El 15 de octubre, por ejemplo, el COE resolvió autorizar el retorno de 24 escuelas fiscales. Y el 22 de octubre autorizó los planes piloto presentados por el Ministerio de Educación para 26 planteles más.
Las instituciones municipales también trabajan en sus PICE. Verónica Flores, directora de gestión educativa municipal, señaló que las directrices sobre cómo actuar en caso de que se presente un contagiado con covid-19 constan en los lineamientos para la aplicación del PICE.
Cada plantel debe contar con un espacio destinado para ubicar a un estudiante que pudiera presentar síntomas, mientras llegan sus padres, dice el Acuerdo 044-A del Ministerio de Educación, en el que se expidieron los lineamientos.
A través de un comunicado, el Ministerio dijo que “con respecto al posible contagio de covid-19 en el núcleo familiar de dos estudiantes que pertenecen a la misma familia y que estudian en una institución particular de Quito, el Ministerio informa que con el propósito de precautelar la seguridad de sus estudiantes y el cuerpo docente, activó de manera inmediata, los protocolos de bioseguridad, en cumplimiento de la disposición segunda del Acuerdo Ministerial O44-A. Esta contiene los lineamientos del Plan de Continuidad Educativa y Permanencia Escolar y Uso Progresivo de las instalaciones educativas, en las que se establecen acciones necesarias si se reporta este tipo de casos, estas se exponen a continuación:
-Ante las circunstancias señaladas, la institución de manera obligatoria debe dar a conocer el particular a todos los miembros de la institución y suspender si el caso involucra a estudiantes y docentes, inmediatamente las clases presenciales para continuar con la educación en casa.
-El plantel debe notificar a las autoridades de Educación y de Salud sobre la situación, para que proceda a activar el cerco epidemiológico correspondiente.
-Hasta el momento se han cumplido con las acciones siguientes:
-Por recomendación de Salud, las clases se han suspendido en dos paralelos de la institución, el Ministerio a través del médico asignado al distrito y de Salud dará seguimiento y acompañamiento a la unidad educativa. Cabe señalar que hasta la fecha no existe evidencia de contagios de estudiantes ni docentes”.
La ministra Creamer reiteró a este Diario que no es obligatorio asistir a clases presenciales, aunque el plantel educativo tenga la autorización del COE Nacional. Los centros deben garantizar a los alumnos y a sus familias formas de acceder a las clases.