Las discrepancias entre los miembros de las familias se agudizan cuando comparten un equipo informático. Foto Referencial: Pixabay
Uno de cada tres padres considera que Internet lo aisla de sus hijos, mientras que uno de cada cinco opina que las nuevas tecnologías son una causa de tensión familiar, reveló el jueves 14 de julio de 2016 una encuesta de Kaspersky Lab.
De acuerdo con la encuesta realizada por la compañía de seguridad informática a 3 700 familias de siete países, el 21 % de los padres y el 22 % de los niños aseguran que los dispositivos con conexión a Internet provocan que haya un ambiente hostil en el núcleo familiar.
El sondeo, efectuado a familias de Estados Unidos, Francia, España, Italia, Reino Unido, Alemania y Rusia con hijos de edades comprendidas entre los 8 y los 16 años, refleja que los patrones de conducta de los niños hacia los padres también han cambiado con las nuevas tecnologías.
Mientras que antes los hijos acudían a los padres cuando se les presentaba alguna duda, ahora el 23 % de ellos “prefiere consultar en línea” en vez de hablar con sus progenitores, afirmó Kapersky Lab en un comunicado.
Casi la mitad de los padres (el 42 %) no son amigos de sus hijos en las redes sociales y el 18 % de los hijos asegura que se debe a que sería “incómodo” tenerlos entre sus contactos.
Las discrepancias entre los miembros de las familias se agudizan cuando comparten un equipo informático, lo que se dio en dos tercios de las familias encuestadas.
Una tercera parte de los padres se quejó de que sus hijos “descompusieron o infectaron con un virus un dispositivo mientras navegaban”, y el 24 % tuvo que pagar por algo que su hijo compró o descargó en Internet.
Por otra parte, el 13 % de los jóvenes se quejó de que sus padres habían descompuesto un aparato electrónico, y el 16 % de que les habían borrado algunos de sus datos de manera accidental.
Ante los resultados de la encuesta, el director de Negocios para el Consumidor en Kaspersky Lab, Andrei Mochola, recomendó a los padres un “diálogo continuo sobre cómo detectar y responder a los peligros potenciales de Internet” y que se pongan de acuerdo con sus hijos para establecer unas reglas “básicas” para la navegación.
“Es natural que el uso inadecuado de cada uno de los dispositivos conectados de otros miembros de la familia llegue a ser una causa de conflicto”, resaltó Mochola, quien añadió que, dado que los usuarios pasan cada vez más tiempo en línea, “la dinámica familiar también está cambiando”.