Estudiantes del Colegio Montúfar manifestándose en la avenida Napo. Foto: EL COMERCIO
Padres de familia fueron mediadores ante los enfrentamientos que se registraron en los exteriores del Colegio Montúfar, ubicado en la avenida Napo, en el sur de Quito. Los miembros del comité central llegaron al sitio para calmar la protesta que encabezaron los integrantes de la banda estudiantil.
Los alumnos cerraron la avenida Napo, como medida de protesta, frente a la negativa que recibieron a una solicitud para participar en el tradicional desfile por las Fiestas de Quito, junto a los egresados.
A las 09:30 de este miércoles 27 de noviembre del 2019, la Policía antimotines retiró a los estudiantes de la vía y limpió los escombros causados por la quema de llantas. El tránsito se abrió y los chicos permanecieron en la entrada principal de la institución.
El presidente del Consejo Estudiantil, Raúl Fonseca, comunicó a sus compañeros que el rector Miguel Chora autorizó la participación de la banda en el desfile y que aún estaba pendiente el visto bueno del Distrito Educativo. Luego, el representante ingresó al plantel para reunirse con las autoridades. Mientras tanto, los chicos permanecieron en el exterior y se negaron a ingresar mientras no exista una respuesta oficial.
Uno de los estudiantes de tercero de bachillerato, que pidió mantener su nombre bajo reserva, aseguró que no detendrán la protesta hasta que no se les garantice su participación en el desfile capitalino. “Cuando el Presidente del Consejo Estudiantil nos confirme que el Distrito firmó nos vamos a retirar”.
“La participación del Montúfar es emblemática en ese desfile, es una tradición que no nos pueden arrebatar”, expresó otro alumno, que tampoco quiso dar su nombre.
Tras varios pedidos por parte de docentes y padres de familia, que llegaron para ayudar en el control de la protesta, los alumnos ingresaron y los docentes cerraron la puerta. Desde adentro, los jóvenes gritaban las consignas de este colegio tradicional entre los fiscales de Quito. Después se vio volar piedras desde el interior, por encima del cerramiento, dirigidas a los policías antimotines que se encontraban en la av. Napo.
Eso causó que los agentes se alejen al menos una cuadra. Acto seguido, los estudiantes volvieron a salir de la institución, con una llanta en llamas. Además sacaron un tronco que colocaron en la av. Napo, para cerrar nuevamente el tránsito vehicular.
Docentes y padres continuaron entre la multitud de manifestantes, intentando calmarlos. Uno de los representantes quiso impedir que los jóvenes le prendieran fuego a un tronco que colocaron en la vía, lo que provocó desmanes. También hubo enfrentamientos entre estudiantes.
Al momento, los muchachos aún esperan una respuesta a sus solicitudes. Los integrantes de la banda estudiantil ingresaron al plantel, tras los enfrentamientos, llamados por la autoridad para dialogar. El resto de estudiantes permanece a la espera al interior del colegio.
Yolanda Villalba, subsecretaria de Educación del Distrito Metropolitano de Quito, señaló que la situación se generó porque los alumnos esperaban recibir los instrumentos de la Banda Estudiantil, para prestarlos a los egresados. Sin embargo -señaló- no se habían realizado las negociaciones correspondientes y el diálogo pertinente con el Ministerio.
“No se ha autorizado ni desautorizado en ningún momento porque no hubo una petición previa”, aclaró la Subsecretaria. Además reiteró que se mantiene una política de puertas abiertas, con el fin de llegar a acuerdos, a través de la Subsecretaria y las direcciones distritales de Educación, que generarán espacios de diálogo. También recordó que las medidas de presión no son los mejores mecanismos para solucionar desacuerdos.
Los alumnos cerraron la avenida Napo, como medida de protesta, frente a la negativa que recibieron a una solicitud para participar en el tradicional desfile por las Fiestas de Quito. Foto: EL COMERCIO
Villalba dijo que en la reunión de la mañana participaron el Presidente del Consejo Estudiantil, el brigadier de la Banda de Paz, el Rector de la institución, el representante de la Dirección Distrital y un delegado de la Subsecretaría de Quito. Tras esa reunión, aseguró, se llegó al compromiso de tener una nueva reunión durante la tarde, para revisar los permisos correspondientes, con el respaldo del Municipio de Quito, y analizar la pertinencia de la participación del plantel.