El juramento a la Bandera se realiza en todos los establecimientos del país. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
El civismo fue el elemento principal de la mañana de este miércoles 26 de septiembre del 2018 en el Colegio Femenino Cardinal Spellman, en el norte de Quito.
Noventa estudiantes de bachillerato de ese colegio dieron el ‘sí juramos’ al unísono para conmemorar el Día de la Bandera Nacional. La ceremonia arrancó a las 08:00. Vistiendo el uniforme de parada y guantes blancos, las estudiantes hicieron su ingreso al patio principal, al ritmo de la marcha.
Luego de ello, se colocaron en bloques para permitir el ingreso de las abanderadas y escoltas, quienes portaron las banderas del Ecuador, de la ciudad y del colegio.
Zamira Zambrano recibió la Bandera Nacional a lograr el mejor promedio ( 9,863), entre sus compañeras. La joven de 17 años piensa que no solo es un reconocimiento a sus buenas notas. Ella ha puesto empeño en otras áreas. Todos los días entrena en un equipo de natación y ha cruzado ocho veces el Lago San Pablo, en Otavalo. También es parte de un grupo de misiones y actualmente aprende alemán en las tardes porque tiene planeado estudiar Ingeniería Aeroespacial en Alemania cuando se gradúe como bachiller.
Su secreto: la organización y constancia. Ella cree que todo es posible cuando se pone ganas y se reparte el tiempo para hacer las cosas que son importantes y las que le gusta.
Ser la abanderada del Pabellón Nacional es un motivo para seguir esforzándose y ser mejor, dice.
Con eso está de acuerdo Damaris Cueva, que fue proclamada como abanderada de su colegio. Para la estudiante es un reconocimiento y un motivo para mejorar.
Así es un ejemplo de que el esfuerzo tiene una recompensa. Por otro lado Ariana Santamaría llevó la bandera de la ciudad. Considera que la clave para cumplir con todas las responsabilidades es priorizar las actividades. “Tampoco se trata de abandonar otros aspectos de la vida”, señala.
Los docentes y estudiantes practicaron durante una semana para que todo salga bien este día. Tras entonar el Himno Nacional, los maestros fueron los encargados de dar mensajes que resaltaron la importancia de los símbolos patrios como parte de la identidad y orgullo del país.
Para Carla Portero, estudiante de tercero de Bachillerato, el día del juramento a la Bandera es una fecha importante porque considera que se fomenta valores de respeto y responsabilidad hacia el país.
Michelle Granda tiene 17 años. Piensa que el dedicar un día a uno de los símbolos patrios es necesario para recordar a todos la importancia de mantener un compromiso cívico con el país.
Tras el juramento general de las estudiantes, se desarrolló el juramento individual por parte de las escoltas y estudiantes.
En el país hay 281 345 estudiantes de tercero de bachillerato que hoy dirán ‘Sí juro’.