Fiestas por los 196 años de provincialización del Guayas. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
Palomo quería volar. Las riendas le molestaban y sacudía con furia su crin blanquísima. “¡Quieto, carajo!”, le decía enérgico Guillermo Jiménez.
Pero el jinete no logró calmarlo. Así que para evitar más berrinches lo mimó con una vuelta por el terreno baldío, minado por estiércol.
Las tierras de la familia Bajaña, entre Los Sauces y La Victoria, en el cantón Salitre (Guayas), se convirtieron en un establo gigantesco. Cientos de caballistas, de todas partes del Litoral, acudieron a la Capital Montuvia del Ecuador para unirse en la V Gran Cabalgata de Integración, organizada por la Prefectura del Guayas.
A las 11:15 de este sábado 26 de noviembre del 2016, el tránsito se paralizó por casi una hora en la vía a Salitre. El asfalto descansó de las llantas de los buses, camiones y mototaxis para vibrar con el paso de los equinos. El eco de las herraduras resonó a lo largo de ocho kilómetros.
Desde antes de las 09:00 los jinetes se concentraron en el punto de partida para engalanar a sus caballos. Los aderezos, tallados en metal, destellaban con el intenso sol.
“Aquí estamos, listos para la montuviada”, dijo orgulloso José Burgos. “La montuviada es alegría”.
Los representantes de las haciendas y asociaciones lucieron sus mejores trajes: camisas a cuadros y de colores fuertes, los sombreros de paja y cuero, botas y bejucos a la mano. También elevaron con orgullo sus estandartes, adornados con cordones y escarcha.
Alfredo Herrera llegó con la Asociación Agrícola Ganadera Nueva Victoria, de Salitre. “Esto es lo nuestro, el campo, los caballos. Somos montuvios”, contó montado sobre Cherokee.
La Prefectura calculó que unos 5 000 caballistas, de la Costa y de la Sierra, llegarían a la cabalgata, organizada como parte de las fiestas por los 196 años de provincialización del Guayas. La Dirección de Turismo del Gobierno Provincial, el Comité de Integración Montuvio Guayasense y el Municipio de Salitre hicieron la convocatoria.
Para Javier Avellán, presidente del comité, este encuentro apoya al folklore montuvio del país. “Ya ha dejado de ser de integración guayasense, ahora integra al Ecuador”.
V Gran Cabalgata de Integración, organizada por la Prefectura del Guayas. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
Verónica Rivadeneira llegó con la Asociación de Criadores de Caballos del cantón Baba (Los Ríos). “Estos encuentros aportan a un objetivo común entre las provincias del Litoral: lograr que el rodeo montuvio, también muy típico de nuestras tierras, sea reconocido como patrimonio cultural intangible del Ecuador”, dijo mientras ensillaban a Lucero, un enorme azabache con una mancha blanca en la frente, en forma de estrella.
Lucero, Palomo y los caballos de la Coop. San Felipe, de Balzar; los de Tierra de Encanto, de Naranjal; los de El Salitral y La Victoria… Todos trotaron dirigidos por sus jinetes, rumbo al centro de Salitre, que mañana cumple 57 años de vida cantonal.
El prefecto Jimmy Jairala lideró el recorrido. El carretero se llenó de centauros montuvios, que galoparon airosos, saludando a quienes se amontonaban en las aceras.
Para refrescarse -pero en especial para aumentar el valor-, los jinetes compartían los ‘cortitos’ o sorbos de aguardiente.
Aunque muchos, como el dueño de Palomo, ya había intercambiado tragos desde antes del recorrido. “Al final se viene la fiesta -dijo Jiménez-. Si se queda, para bailar”.