Vista aérea de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, sede del Hábitat III. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
Durante el evento Hábitat III asistieron 45 000 personas a la sede de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, pero las Naciones Unidas estima que participaron 100 000 tanto en la sede principal como en las actividades paralelas realizadas en otros sitios de la capital. Los estudiantes de la facultad de Comunicación Social de la Universidad Central, a través de Radio Hábitat, cubrieron temas relacionados a la Nueva Agenda Urbana que destacan puntos de desarrollo e inclusión de la capital ecuatoriana.
Uno de los segmentos de la Radio está enfocado en cuentos y relatos por la memoria de lugares históricos quiteños. Entre ellos está la Plaza Fosch, La Guaragua y la Calle García Moreno.
Un paso decisivo a la modernidad
Plaza Foch. Foto: Archivo / EL COMERCIO
Actualmente la Plaza Foch es uno de los centros turísticos de fiesta y diversión más concurrido y popular de la ciudad. En la época colonial era habitado por las personas más adineradas de la capital.
La Mariscal fue el primer barrio en Quito que cambió su modelo urbanístico para dejar de lado el modelo colonial. La Plaza Fosch está ubicada en uno de los barrios más antiguos de Quito y se caracteriza por haber sido el primero en dar un paso decisivo a la modernidad.
No hay fiesta de Quito en la que no se escuche ni quiteño que no le cante a La Guaragua
La calle Galápagos conocida como La Guaragua. Foto: Archivo / EL COMERCIO
El chulla Quiteño, de Alfredo Carpio Flores y Luis Alberto Valencia, se convirtió en un himno para el país en 1947. En la letra se menciona La Guaragua, una de las calles tradicionales del Centro Histórico de Quito y que actualmente se llama Galápagos. Hace 70 años fue uno de los barrios más frecuentados y conocidos de la ciudad.
Cuenta la leyenda que el sector era de una Terrateniente que dividió la tierra para entregarle a sus 90 amantes. A partir de ahí se empezó a formar el barrio la Guaragua que significa en Quechua lugar pintoresco.
La calle García Moreno, fuente del comercio colonial
Calle García Moreno, en el Centro Histórico de Quito. Foto: Archivo / EL COMERCIO
Según el historiador, Luciano Andrade Marín, la calle de las siete cruces simboliza la conquista espiritual a la que fueron sometidos los aborígenes.
La calle García Moreno se caracteriza por su arquitectura colonial. El cronista quiteño, Juan Paz y Miño, atribuye su estructura a la llegada de los españoles en 1534. A partir de esta calle se empezó a edificar la ciudad al repartir las tierras entre los conquistadores.
Cápsula calle García Moreno
Este pasaje era conocido por los incas como el puente entre el Panecillo y la loma San Juan. En la época colonial, ambos cerros eran la fuente del comercio.
Una de las ceremonias que se celebraban en la calle de las siete cruces era la Semana Santa. La práctica fue suprimida en la época Republicana a mediados del siglo XIX por el presidente Jose María Urbina. Veinte años más tarde el ex presidente Gabriel García Moreno reestableció la celebración. Actualmente la ceremonia de la Semana Santa reúne a más de 50 000 fieles católicos en la calle García Moreno.