El evento se llevó a cabo por la por la Independencia del Perú. Foto: Manuel Quizhpe / EL COMERCIO
Con un ambiente festivo, combinado entre música, bailes, cultura y gastronomía, finaliza en Cuenca la Semana Internacional de Perú, que celebra un año más de Independencia. La clausura está prevista para las 17:00 de este sábado 30 de julio, en la plazoleta La Merced.
El programa arrancó el miércoles 27 de julio, con un recorrido por el parque arqueológico de Pumapungo, con niños de las colonias vacacionales. Al día siguiente hubo un curso de gastronomía, dictado por chef peruano Michael Wagner. El vienes 29 se realizó un concierto de baladas peruanas.
Según Cristian Coronel, analista de la Dirección de Relaciones Exteriores, la Semana Internacional de Perú pretende fomentar la interculturalidad entre anfitriones y visitantes. “La idea es conocer la cultura de los extranjeros y que ellos se acoplen a las tradiciones de los cuencanos”.
Este sábado 30 de junio se desarrolló un Festival Gastronómico, que estuvo acompañado con bailes típicos de Perú y Ecuador. Además, se desarrolló un concierto de música peruana. Entre los presentes estuvo el Cónsul de Perú, en Loja, Eugenio Maury Parra, así como autoridades de Cuenca.
En cada uno de los eventos, realizados durante los cuatro días en diferentes sectores de la capital azuaya por la Independencia del Perú, participaron peruanos y cuencanos. Sin embargo, en el Festival Gastronómico estuvieron ciudadanos de diferentes nacionalidades que residen en Cuenca y que aprecian la gastronomía peruana.
Fernando Pacurucu es cuencano e incursionó en la comida peruana por la alta demanda que existe. Tiene dos chefs: un peruano y una cuencana que trabajó en Lima. Él instaló un stand para ofrecer el típico cebiche, causa limeña, chicha morada y el pisco peruano.
Pacurucu reconoció que hay mil maneras de hacer cebiche y que en la mayoría de casos se utiliza el pescado. “Yo uso corvinilla, un pescado blanco, con la particularidad de que vierto limón y luego cocino”. Después se echa sal, cebolla, culantro y ají rocoto.
La causa limeña se prepara por capas, con papa chaucha, aguacate, atún, camarón o pollo; en la última capa va la decoración: aceituna, salsa con queso…
Entre tanto, la chicha moraba se prepara con choclo o mazorca morada. Se le hace hervir, se saca el jugo y se cocina con manzana y piña, luego se sirve fría. Pacurucu viaja todos los meses a Tumbes para traer los insumos hasta Cuenca.