En el caso de que la emisiones no disminuyeran, el espesor y la extensión de la capa de nieve podrían reducirse hasta un 70%, advierten los investigadores del Instituto para el Estudio de la Nieve y las Avalanchas de Suiza. Foto: Wikicommons
La capa de nieve que cubre los Alpes cada invierno podría disminuir un 30% antes del final de este siglo, incluso si se limita la subida de la temperatura a 2º C, como lo prevé el acuerdo de París sobre el clima, afirma un estudio difundido este jueves 16 de febrero de 2017.
La capa de nieve va a disminuir y “las futuras emisiones (de gas con efecto invernadero) determinarán en cuánto”, afirma Christophe Marty, uno de los autores del estudio difundido en la revista The Cryosphere.
En el caso de que la emisiones no disminuyeran, el espesor y la extensión de la capa de nieve podrían reducirse hasta un 70%, advierten los investigadores del Instituto para el Estudio de la Nieve y las Avalanchas de Suiza.
Si esa previsión se llegara a cumplir, sólo las estaciones invernales situadas a más de 2 500 metros de altitud podrían garantizar una temporada completa de esquí. Pero, cualquiera sea el nivel de las emisiones de gas de efecto invernadero, el estudio demuestra que la capa de nieve será menos espesa “en todas las altitudes y en todos los períodos”.
Hasta ahora, los científicos no estaban seguros del impacto de la subida de las temperaturas en las nevadas en los Alpes debido a que la mayoría de los modelos climáticos preveían un leve incremento de las precipitaciones invernales.
Sin embargo, debido al alza de las temperaturas aumentarán las lluvias y no las nevadas. En las zonas situadas por debajo de
1 200 metros, las proyecciones indican que en invierno ya no habrá una capa de nieve continua.
Una cuarta parte de las estaciones de esquí de los Alpes se encuentran por debajo de los 1 200 metros de altitud, indica el comunicado. “Numerosas localidades alpinas dependen fuertemente del turismo invernal, la economía y la población de esas regiones sufrirán”, escribe Sebastian Schlögl, uno de los autores del estudio.
Más allá del turismo, “lluvias más importantes en invierno, una capa de nieve menos importante y la desaparición de los glaciares alpinos modificarán el curso de los ríos alpinos y su variación”.
En los Alpes, la gestión del agua con fines de irrigación, de producción hidráulica y la navegación sufrirán también las consecuencias del calentamiento acelerado del planeta, indicó el estudio.