El abandono de mascotas en el parque Itchimbia, en el centro oriente de la ciudad, ha aumentado en las últimas semanas. Perros sin dueño aparecen repentinamente, sobre todo cada fin de semana, en las puertas de la administración del parque.
Algunos llevan correa, mientras que otros se ubican en diferentes zonas de este lugar con la esperanza de que aparezca su propietario.
Christian Rivera, director del COE Metropolitano, dice que es triste ver cómo llegan las personas a hacer deportes y dejan a sus perros en esta zona.
Esto crea un problema no solo al animal, sino también a los usuarios del parque porque los perros deambulan por el sector, viran los basureros, rompen las fundas y algunas personas los tienen miedo.
Todo perro abandonado, explica Rivera, es evaluado y se lo lleva a Urbanimal para que sea esterilizado. En ocasiones lo regresan a la zona y en otras lo ponen en proceso de adopción. Algunos usuarios dicen tener miedo de ciertos perros que hay en el sector, por lo que llevan un palo cuando caminan.
Las autoridades del parque monitorean constantemente todas las áreas. Los perros que ya se encuentran viviendo en esta zona desde hace varios años, ya fueron esterilizados y se han convertido en una compañía para los guardias.
En el Itchimbia se reparten bolsas para que los usuarios limpien los desechos de sus perros. Foto: Eduardo Terán/EL COMERCIO
Además, ya se sabe por qué áreas se mueven y dicen que son perros sociables. Se mantiene un control de su salud. Pero, no es la idea que los parques se conviertan en un refugio de animales abandonados.
Otro de los problemas es que los propietarios llevan a sus mascotas sin correa o no limpian sus excrementos. Por eso, se está llevando una campaña en los parques para difundir la ordenanza 0048 sobre la Tenencia, Protección y Control de la Fauna Urbana.
Los guardabosques en el Itchimbia reparten bolsas para que los usuarios limpien los desechos de sus perros. En estas fundas se puede leer los consejos para mantener una buena convivencia entre animales y humanos.
Rivera recuerda a las personas que acudan al parque en esta época de vacaciones, que lleven a sus perros con una placa de identificación para que sean devueltos en caso de que se pierdan. Además, explica que hay cámaras en las cuales se puede identificar a quienes dejan a sus mascotas en el parque.
Las sanciones por no llevar a los perros con correa pueden ascender hasta una remuneración básica. La idea es no llegar hasta esta sanción, dice Rivera, por eso se busca que las personas tomen conciencia de esta problemática a través de las campañas.