Termina la Semana Santa, y con ella, la tradición de preparar y comer fanesca.
Aquí le presentamos algunos consejos para evitar, o en algunos casos calmar, el malestar que podría presentarse tras ingerir este delicioso platillo.
¿Por qué se produce malestar?
Según la médico especialista en Gastroenterología, Verónica Astudillo, la fanesca “es un plato muy contundente”, ya que lleva una serie de alimentos en su preparación como son los granos, “una inmensidad de proteínas, tanto de origen animal, como de origen vegetal y también la combinación de especias que hacen que sea pesada para la digestión”, explica.
Las gramíneas (chocho, arveja, choclo, fréjol) en especial, son los alimentos que tienden a fermentar porque “contienen un poco de fibra que no se absorbe (la corteza), y generan levaduras o fermentos que liberan una serie de gases a nivel abdominal, sobre todo intestinal”, menciona la especialista. Además, está la lactosa (leche y queso) que produce intolerancia en algunas personas.
¿Cómo calmar la indigestión?
Tomar enzimas digestivas antes de comer la fanesca, o el uso de carbón activado posterior a su ingesta, “podría mejorar la tolerancia a ciertos alimentos, además de la distención o la flatulencia que generan”, explica Astudillo.
En nuestro medio existen algunas plantas medicinales a las que se les ha atribuido algunas propiedades curativas. Por lo general, el ‘agüita’ de boldo, de orégano, la manzanilla (que tiene propiedades analgésicas antes que antiflatulentas) mitigan un poco los síntomas, “todos irían bien, pero generalmente no son suficientes”, asegura.
Señales de alerta
Sin embargo, hay algunas señales que debemos tomar en cuenta.
Cuando además de la distención abdominal, la flatulencia y los gases, el malestar viene acompañado de un dolor de estómago muy fuerte, que no cede con las medidas que la Doctora recomienda; sino que presenta otros síntomas como “fiebre, diarrea, náusea, vómito, debemos pensar que no se trata nada más de una transgresión alimentaria o una intolerancia, y ahí es cuando debemos buscar ayuda al médico de cabecera o al médico especialista”, recomienda la Gastroenteróloga.
Cuidado con los excesos
La tradición dicta que la fanesca se acompaña de molo y arroz con leche o higos con queso.
Pero justamente esta mezcla de alimentos es la que genera la intolerancia, asegura Astudillo, ya que “nuestro intestino no está acostumbrado, entonces se desborda la capacidad digestiva”, dice.
Las recomendaciones
Recuerde que cada persona es un mundo distinto y que conoce las enfermedades que padece (reflujo, dispepsia, gastritis, síndrome de intestino irritable), debe tomar en cuenta que si come estos alimentos, probablemente tenga este tipo de malestar.
Otras recomendaciones pueden ser racionalizar la porción o escoger uno u otro plato, “no se sugiere todo al mismo tiempo”, advierte la especialista.
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