Los cereales andinos se pueden utilizar en preparaciones para llevar y bebidas energizantes como lo hace Tarpuy. Foto: Eduardo Terán/ Sabores.
Hace ocho meses el sueño de Felipe Chimbo se hizo realida: comenzó la producción -en planta- de sus alimentos, que se cobijan bajo la marca Tarpuy. Este nombre en kichwa significa siembra y de allí parte la filosofía que da vida a la empresa que elabora alimentos de consumo diario como pan y galletas con productos de la tierra.
La materia prima que se utiliza, dice Chimbo, viene de cultivos orgánicos o agroecológicos locales. Siempre aportando al comercio justo, recalca Chimbo; en su planta, trabaja con amaranto, quinua, arroz integral, el trigo, el maíz y la cebada, entre otros granos que provienen de Imbabura y Cañar. “Se promueve la agricultura con la producción que viene de nuestros padres”, dice el propietario.
Chimbo pertenece a la nacionalidad Cañari pero está radicado en Quito desde hace más de 10 años. Ya no porta la vestimenta tradicional, pero dice que conserva en su trabajo los preceptos cañaris: “lo que hacemos es rescatar la alimentación ancestral a través del uso de cereales y pseudo cereales andinos”.
En 1994, Chimbo empezó con la idea de tener una entidad que se dedicara al desarrollo humano a nivel de salud y medicina, educación y alimentación con un grupo de personas en Cañar. Ahora él se enfoca en la parte alimenticia,“lo que estamos brindando es un estilo de vida” y por ello dan al público alimentos ‘biológicamente apropiados’ como los llama él porque aportan al cuerpo el balance y energía que requiere. A partir de este concepto elaboran productos que podrían evaluarse como ‘snacks’ saludables.
Con el amaranto como base, por ejemplo, trabajan cuatro tipos de galletas; combinando el amaranto reventado con ajonjolí, con jengibre, con trigo y con chocolate al 60%. También se lo expende como leche de amaranto en bebidas energizantes, ya sea puro o mezclándolo con frutas: mora, piña y maracuyá. Esta bebida, cuenta Chimbo, es un suplemento que aporta con los requerimientos nutricionales para una dieta balanceada.
Chimbo indica que con el grano de amaranto también se realizan procesos naturales para obtener la harina y hacer pan de amaranto que no contiene gluten, por lo tanto se convierte en un alimento ideal para celíacos. La línea de alimentos de Tarpuy no se muestra flexible en cuanto al uso de a lácteos y huevos. Para Chimbo no significa que sea una alimentación vegetariana estricta, pero sí una alimentación integral sin químicos ni aditamentos.
En la línea nutritiva se aprovecha el maíz en harina para hacer bocaditos integrales. La harina se fríe y se acompaña de semilla de sambo, tostado y habas. Esta combinación está disponible en paquetes personales; así funciona como un ‘snack’ entre comidas.
El uso tradicional de estos productos -para Chimbo- se ha llevado a un nivel más consciente del aspecto nutricional porque como filosofía de vida están siempre en la búsqueda de “contribuir a la salud”, con alimentos que han sido parte del recetario ancestral del país.