Los cerveceros artesanales se movilizan por los damnificados

La cervecería Bonanza sirvió como refugio a los moradores del sector que se quedaron sin luz. Foto: Cortesía Joachim Schulze

La cervecería Bonanza sirvió como refugio a los moradores del sector que se quedaron sin luz. Foto: Cortesía Joachim Schulze

Desde Cuenca llegaron a la destilería Bonanza en Portoviejo 12 000 litros de agua para donar. Foto: Cortesía Joachim Schulze

La comunidad cervecera ecuatoriana también ha encontrado formas de ayudar a las víctimas del terremoto 7,8 que dejó graves afectaciones en la Costa. Una de las primeras iniciativas fue en unión entre las cervecerías Bandido Brewing, Abysmo, Camino del Sol Cerveza Artesanal y Andes Brewing Co. El 18 de abril publicaron en sus redes sociales que había logrado recaudar más de USD 1 200 que se donaron en medicina, agua, artículos de aseo, comida para bebes, vajillas desechable entre otros productos. Estas donaciones se recibieron el domingo en las instalaciones de Impaqto Quito.

Pero las campañas no quedan en un día. Julio Espinosa, presidente de la Asociación de Cervecerías del Ecuador (AsoCerv), -que agrupa al gremio artesanal- cuenta que están trabajando en una iniciativa que está por lanzarse al público. La idea lleva el nombre de #UnbarrilporEcuador al que ya se han sumado 20 cervecerías locales. Cada empresa dona un barril a través de distintos eventos y el dinero recaudado por esas ventas será destinado 100% para los damnificados. Espinosa explica que con los 20 barriles que ya cuentan se aspira reunir USD 4 000.

Los esfuerzos independientes de cada cervecería o afines encuentran eco y apoyo en el gremio. Javier Carvajal, Dr. en ciencias y alimentos y catedrático de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE) en Quito, por su parte está recibiendo cerveza de donantes locales.

A partir de este producto realiza un proceso de destilación para producir alcohol antiséptico que se donará a las poblaciones afectadas. Hasta el momento han recibido 2500 litros de cerveza caducada o residuos de cervezas que se recogen en las microcervecerías, entre otras.

El proceso toma un par de horas y se estima obtener de 300 a 350 lt de alcohol antiséptico. Carvajal añade que se puede aumentar la producción a 1500 lt de alcohol por semana con donaciones de azúcar y melaza. Así mismo están realizando procesos de purificación de agua para enviar en envases a través de la PUCE.

La cervecería Sabai inició campañas para ayudar. Con hashtags como #Ecuadorjuntos los miembros de esta cervecería quiteña incluso se movilizaron para recibir donaciones.

El galpón La Tejedora donde se encuentran ubicados en Cumbayá se ha convertido en centro de acopio, dice Javier Salas, gerente de Sabai, donde reciben donaciones de víveres e insumos. Desde el 19 de abril Sabai se vinculó con la fundación Un Techo Para Mi País. Hasta el 30 de abril por cada botella de cerveza que se venda se donará USD 1 a la fundación quienes estarán construyendo casas para las víctimas del terremoto.

Aquí también pueden unirse voluntarios que deseen construir viviendas emergentes puesto que la cervecería trabaja en alianza con GreenWood Builders quienes construyen viviendas ecológicas y se encuentran en las zonas afectadas. Salas explica que se arman grupos de 12 personas que estén dispuestos a ir a la zona y se pueden inscribir a través del local.

En Portoviejo la Cervecería Bonanza también se ha movilizado por los suyos. A partir del sábado 16 de abril -día del terremoto- Joachim Schulze empezó a colaborar con sus instalaciones como refugio donde recibieron a 200 personas durante las primeras cuatro noches. La falta de luz movilizó a los vecinos hacia esa zona donde además de refugio les dieron comida. Schulze cuenta que incluso prendieron el generador y permitieron cargar los celulares a las personas.

Más allá de la ayuda inmediata Schulze empezó a trabajar para purificar agua. Han donado cerca de 2400 litros diarios pero siguen tratando de conseguir lámparas UV e inyección de ozono para aumentar la producción. Además donaron la producción de alcohol que tenían en stock con 100 lt que proveyeron a la zona. Hasta Portoviejo llegó incluso una donación de la AsoCerv desde Cuenca con 12 000 lt de agua pruficada que se despachó ayer dice Schulze.

La cervecería Bonanza sirvió como refugio a los moradores del sector que se quedaron sin luz. Foto: Cortesía Joachim Schulze

Las muestras de apoyo a los afectados se siguen presentando de diversas formas y este gremio ha buscado la forma de aportar con sus conocimientos para aprovechar tanto ingredientes como espacios para colaborar con los damnificados.

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