Hace 123 años, el 4 de noviembre de 1897, se fundó en la provincia
del Guayas, el Ingenio San Carlos. Posteriormente, el nombre del
ingenio se transformó en Sociedad Agrícola e Industrial San Carlos
S.A. Para 2020, esta empresa ecuatoriana ya contaba con 989
accionistas debidamente registrados.
La Sociedad Agrícola e Industrial San Carlos es una agroindustria
azucarera con presencia a escala nacional, que continuamente se
preocupa en diversificar e innovar sus productos, para afianzar su
presencia en todo el Ecuador.
Esta industria y la producción de azúcar está tan arraigada en el
cantón Marcelino Maridueña, población en la que nació, a tal punto
que sus propios habitantes la han incorporado en su identidad y
manifestaciones culturales.
Ejemplo de ello son la música y composiciones de Luis Salazar,
miembro y fundador del Trío Los Carlos, quien entona en una de sus
canciones:
“Tierra de caña de azúcar,
cuna de lindas mujeres
es mi San Carlos Querido,
donde tengo mis quereres.
Fuente de mucho trabajo,
de riqueza, para todo el Ecuador,
la zafra ya comenzó.
Vamos la caña a cortar,
con gente de Sierra y Costa
que vienen a trabajar…”
Así como el azúcar y el Ingenio se ha venido renovando en la
identidad y cultura de Marcelino Maridueña, la industria San Carlos
también ha evolucionado y diversificado la presentación de sus
principales productos como el azúcar blanca y morena, y también su
modelo de negocio.
La firma produce melaza y miel para la posterior comercialización de
alcohol y se ha adaptado exitosamente a las nuevas tendencias en
cuanto a la comercialización de edulcorantes naturales con su
producto ‘Evia’ el endulzante natural a base de stevia
Pero la Sociedad Agrícola e Industrial San Carlos no sólo se
concentra en el tema agroindustrial, sino que, además, genera y
vende los excedentes de energía eléctrica con el bagazo de la caña,
lo cual demuestra cómo se aprovechan al máximo los residuos de la
producción de azúcar.
En Ecuador, la empresa es tan reconocida que Kantar Worldpanel
—consultora líder en medición de compras y comportamiento del
consumidor en 15 países de América Latina— certificó que la marca
San Carlos tuvo una penetración del 91% en todos los hogares
ecuatorianos en la categoría de endulzantes durante el 2020.
Con una importancia, además, del 30,2% en volumen generado
(kilogramos vendidos); y el 30,7% en valor/ventas (gasto acumulado
en millones de dólares) de los hogares compradores.
Esto lo lleva a posicionarse como “la marca Número 1 en el mercado
de Endulzantes, en términos de valor y volumen vendido” en el país,
según Kantar Worldpanel.
“En Marcelino Maridueña no existe la pobreza extrema, se aprecia un
trabajo adecuado, legalmente remunerado, es decir con beneficios
sociales para los trabajadores”, afirma Augusto Ayala Ayala, gerente
Administrativo de Sociedad Agrícola e Industrial San Carlos, al
analizar el impacto económico de esta compañía en las poblaciones
que la rodean.
Las comunidades del cantón Marcelino Maridueña —lugar en el que se
asientan los predios agrícolas e industriales— son testigos del
esfuerzo de la Sociedad Agrícola e Industrial San Carlos por
fomentar su desarrollo y bienestar. De allí proviene el lema: “El
azúcar es más que azúcar, cuando lo hace San Carlos”.
La operación del ingenio San Carlos va de la mano de acciones
concretas en favor de las zonas de influencia en los ámbitos de la
salud, la educación y el deporte, entre otros.
En esa línea, la Sociedad Agrícola e Industrial San Carlos
construyó, hace más de setenta años, el hospital San Carlos con
profesionales de diferentes especialidades médicas, para
salvaguardar la vida de los trabajadores y sus familias, al igual
que los habitantes de Marcelino Maridueña y sus sectores aledaños.
La responsabilidad social del ingenio San Carlos se hace presente al
otorgar otros beneficios a los trabajadores, entre los cuales está
la educación gratuita de sus hijos y familiares en la Escuela de
Educación Básica Luis Vernaza y el Colegio de Bachillerato San
Carlos, establecidos hace 80 y 60 años, respectivamente.
Son instituciones que regenta la empresa en las cuales se ofrece
educación desde inicial hasta décimo año en la sección matutina y de
primero hasta tercer año de bachillerato general unificado.
Adicionalmente, la jornada nocturna permite a los estudiantes que
así lo deseen, ingresar a estudiar en el Centro de Capacitación de
Aprendices.
“El Ingenio San Carlos entregaba libros y desayuno escolar a los
estudiantes”, recuerda Bolívar Veloz. ex rector de la Escuela Luis
Vernaza.
La salud física y emocional de niños, niñas y jóvenes ha sido otro
de los puntales de acción para la Industria San Carlos. Por ello, se
fundó el estadio San Carlos y las canchas del club San Carlos. “Como
toda ciudad tiene un equipo de futbol, la Sociedad Agrícola e
Industrial San Carlos, aparte de ofrecer educación, se enfoca en el
deporte para los hijos de los trabajadores”, sostiene Roberto Franco
entrenador del Once Azucarero, equipo conformado por niños y jóvenes
del Cantón que ha ganado cinco campeonatos en torneos organizados a
nivel nacional por un importante diario de Guayaquil.
El Ingenio San Carlos continuará trabajando para producir productos
de excelente calidad, por el bien de la comunidad.
“La dulzura está en la gente de Marcelino Maridueña, en su
cordialidad y amabilidad. La dulzura está en la niñez de este pueblo
sano, en el aroma de la caña, que es más penetrante cuando es en
tiempo de zafra. La caña endulza la vida de los pobladores”,
concluye Marco Rivera trabajador de la picantería Margarita y
orgulloso morador de Marcelino Maridueña.